Decisión tras una reunión con el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública

Vecinos retiran su protesta en Perisur

Lamentan "haber afectado los ingresos económicos de empleados y locatarios"

AGUSTIN SALGADO

Por segundo día consecutivo manifestantes y locatarios se enfrentaron verbalmente en una de las entradas de Perisur; sin embargo, por la tarde los inconformes se reunieron con el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, Fernando Schutte, y se comprometieron a levantar el boicot.

En esta ocasión más de 50 empleados de negocios del centro comercial salieron al estacionamiento para invitar a los automovilistas a ingresar a la plaza, lo que provocó reacciones de enojo entre las vecinas de Jardines del Pedregal que desde el lunes permanecieron en la entrada principal, por la calle Cerro de Zacatépetl, "informando a la ciudadanía de los altos índices de inseguridad" que prevalecen en el centro comercial.

Minutos después de las 10 de la mañana medio centenar de empleados de Perisur salieron a los accesos del costado poniente de la plaza para invitar a los automovilistas a ingresar, y también para dialogar con los inconformes y explicarles que las acciones que realizan desde principios de semana les afectan directamente, ya que gran parte de sus percepciones mensuales provienen de comisiones por ventas.

Con algunas pancartas, los trabajadores permanecieron durante cuatro horas, y cuando se retiraron las vecinas del Pedregal ellos regresaron a sus locales. A diferencia del jueves, en esta ocasión eran más locatarios que manifestantes.

Ernesto Rojas, dueño de una tienda de ropa, explicó que la intención era convencer a los clientes de que no hay nada que temer en la plaza comercial, y al referirse a las inconformes estableció: "ojalá conserven la cordura, y entiendan que nosotros no somos responsables ni tampoco aplaudimos a los delincuentes. Estaban acabando con la buena labor del centro comercial. Las mismas señoras que se manifestaron durante toda la semana, hace meses venían, dejaban a sus hijos desde la tarde hasta la noche, les daban un celular, dinero para gastar y luego mandaban a los choferes por ellos".

A las cinco de la tarde se inició una reunión entre inconformes y miembros del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, en la que se llegó al acuerdo de retirar el boicot y participar en la marcha del próximo 27 de junio en contra de la delincuencia.

En un documento, los vecinos del Pedregal establecieron que "las manifestaciones realizadas durante la semana no fueron un boicot, sino una forma de expresión de una sociedad dolida, indignada e impotente ante la inseguridad e impunidad que vive nuestro país", y lamentan "haber afectado los ingresos económicos de empleados y locatarios".