Dante y su no tan divina comedia

La postulación del ex gobernador Dante Delgado Rannauro bajo las siglas de la alianza Unidos por Veracruz (PRD, Convergencia y PT) tampoco fue tersa. Se le reprochó la persecución de políticos opositores que caracterizó a la administración estatal que encabezó entre 1988 y 1992, como sustituto de Fernando Gutiérrez Barrios, quien dejó la gubernatura para ser secretario de Gobernación de Carlos Salinas de Gortari.

Su pretensión de ser nuevamente gobernador veracruzano le ha valido comparaciones con su ex correligionario Víctor Cervera Pacheco, quien gobernó Yucatán 10 años, en su momento muy criticado por el PRD.

Luego de romper con el PRI en 1996 y crear Convergencia por la Democracia, Dante Delgado fue detenido y encarcelado hasta abril de 1998, acusado de peculado por 450 millones de pesos, abuso de autoridad e incumplimiento de un deber legal. Fue, liberado porque los delitos que se le imputaron habían prescrito, no porque fuera considerado inocente.

Una vez libre, contendió sin éxito en 2000 por un escaño en el Senado bajo las siglas de la Alianza por México, que integraron PRD y Convergencia, desplazando al perredista Arturo Hervis Reyes, a quien no le valió ganar en un proceso interno el derecho a ser candidato.

La candidatura de Dante se complementa con la peor etapa del PRD en Veracruz, donde algunos consideran que el sol azteca ya es sólo un cascarón. En los últimos comicios locales el perredismo perdió zonas consideradas bastiones, y en 2003 no ganó una sola diputación de mayoría por la entidad.

En caso del PT, aunque líderes locales y ediles comprometieron su apoyo al priísta Fidel Herrera, la dirigencia nacional los obligó a concretar la alianza con el PRD y Convergencia.

(GL Y ATM)