Nadie que cumpla con el fisco debe asustarse, dijo el secretario de Hacienda

Censo de contribuyentes reales y potenciales en 2005, anuncia Gil Díaz

El programa abarcará medidas para incluir a quienes están en la economía informal

ANTONIO CASTELLANOS Y DAVID CARRIZALES ENVIADO Y CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 1Ɔ de junio. El secretario de Hacienda y Crédito Público, Francisco Gil Díaz, anunció que el próximo año comenzará el censo de todos los contribuyentes reales y potenciales, pero aclaró que dicha acción no debe ''asustar'' a quienes cumplen puntualmente con el fisco. Este programa abarcará también medidas para incluir en el padrón a quienes participan en la economía informal.

El secretario informó que la campaña se llevará a cabo a pesar de que se han logrado incrementar los ingresos tributarios no petroleros, que registran un incremento de dos puntos del producto interno bruto (PIB).

Otro avance importante, señaló, es el manejo de la deuda externa, cuyo 80 por ciento ya está colocado a tasa fija, además que se han aumentado los plazos y bajado los costos. Ello ha permitido tener grado de inversión de las tres calificadoras internacionales.

Interrogado sobre si mantiene la misma perspectiva de diciembre de 2003 acerca de la aprobación de las reformas fiscales, cuando en una reunión del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) dijo que esperaba que salieran ''pronto y bien'', el funcionario respondió de manera tajante: ''No''.

Sobre este tema, el secretario de Economía, Fernando Canales Clariond, expresó que las reformas estructurales podrían ser aprobadas en el próximo periodo ordinario de sesiones del Congreso, y descartó que la renuncia del titular de Energía, Felipe Calderón Hinojosa, vaya a retrasar la reforma energética.

Nadie, recalcó Canales, es ''insustituible y el proceso continuará una vez que el presidente Vicente Fox designe al sucesor de Felipe Calderón, quien es mi amigo desde hace muchos años. La decisión que tomó la respeto, pero definitivamente nadie debe pensar que por esa razón se frenarán los cambios legales''.

El titular de Economía subrayó que él no tiene aspiraciones presidenciales y que la renuncia de Calderón no divide a su partido, Acción Nacional. Por encima de esa dimisión prevalece la unidad frente a los problemas que el país enfrenta, afirmó.

Al participar en el 16 foro nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), Gil Díaz expuso que las autoridades hacendarias tienen el apoyo de todos los partidos políticos representados en el Congreso para llevar a cabo el censo de los contribuyentes. Será un programa muy costoso, advirtió, pero insistió en que no se trata de una acción de terrorismo fiscal. ''Nadie que cumple debe asustarse'', recalcó.

Luego se refirió al precio del petróleo y señaló que alcanzó sus niveles más altos en dos décadas. A esto contribuye la inestabilidad en Medio Oriente, los bajos inventarios y el dinamismo de la demanda global, señaló.

Gil Díaz informó que el crecimiento de la economía mundial se ha reflejado favorablemente en las exportaciones mexicanas, y que la evolución de las importaciones de bienes intermedios y de maquila permite prever una producción mayor en los próximos meses.

El secretario de Hacienda afirmó que este año se espera que la economía de Estados Unidos crezca a tasas mayores a su potencial, aunque se anticipa una desaceleración en 2005. A pesar de ello, la producción industrial mantendrá su dinamismo.

Como consecuencia de lo anterior, varias instituciones financieras han revisado al alza sus pronósticos de crecimiento para México en 2004 y 2005. Para este año, señaló, las proyecciones prevén una tasa de 4 por ciento y ligeramente inferior para 2005, que podría situarse en 3.72 por ciento.

De acuerdo con el análisis de Gil Díaz, México ha sido una de las economías emergentes menos afectadas por la reciente volatilidad financiera, debido al moderado déficit en cuenta corriente, financiado con elevadas reservas internacionales, tipo de cambio flexible, sistema financiero sólido, finanzas públicas sanas, bajos niveles de endeudamiento externo y baja presión de refinanciamiento externo.