Libros bajo llave y maestros que no saben usar textos adicionales, entre las causas

Subutilizadas, bibliotecas de aula; "prevalece cultura del resguardo"

Pocos autores mexicanos escriben para los niños, lamenta la directora de Materiales de la SEP

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

Los estudiantes aún no aprovechan del todo las bibliotecas de aula. La Secretaría de Educación Pública (SEP) encontró que en 70 por ciento de los salones de clases los libros se usan, pero en 30 por ciento los materiales están lejos de los niños por diversas razones: se encuentran bajo llave, siguen en sus cajas o los profesores desconocen cómo usarlos.

Elisa Bonilla, directora de Materiales y Métodos de la SEP, responsable de la edición de los libros que publica la secretaría, señaló que en las escuelas mexicanas todavía prevalece la "cultura del resguardo" y algunos maestros no saben cómo usar en sus clases libros adicionales a los de texto.

"Cuando reciben los materiales muchos maestros saben qué hacer, se sienten encantados, pero otros pueden sentirse hasta amenazados, porque están acostumbrados a hacer las cosas de cierta manera y no saben cómo incorporar los libros a la práctica."

Bonilla consideró que desde que la SEP puso en marcha el Programa Nacional de Lectura, en marzo de 2002, se han dado avances, pero "falta mucho" por hacer; por ejemplo, elaborar más estudios sobre el tema y formar a "mediadores", personas que se encarguen de acercar al niño o al adulto a la lectura.

Otro problema es que no hay suficiente oferta de autores mexicanos de libros dirigidos al público infantil. Lo atribuyó a que ese tipo de literatura aún es visto en el medio "como la Cenicienta" y a la creencia de que los niños sólo leen cuentos.

Bonilla ofreció ayer una conferencia de prensa para informar sobre el primer Congreso Nacional de Lectura y Escritura, que se llevó a cabo la semana pasada en la ciudad de Durango. En ese contexto, se le preguntó sobre los avances del programa de lectura y el de bibliotecas de aula.

La SEP, señaló, "de ninguna manera está complacida con los avances" que se han dado. Explicó que en muchos casos las bibliotecas de aula están cumpliendo su cometido pero en otros no, porque los libros ni siquiera llegan al estudiante debido a que se mantienen bajo resguardo.

"Hay una cultura que tenemos que romper. No se trata de apretar el botón y que los libros se lean. Hemos encontrado que en 70 por ciento de las aulas los libros están funcionando, pero en otro 30 por ciento la situación es variable."

Resultados preliminares de un estudio que se dará a conocer en los próximos meses señalan que, en los mejores casos, se leen esos libros no sólo en la escuela, sino que también se solicitan para préstamo a domicilio.

La generación de niños que actualmente asiste a primaria y prescolar está en ventaja frente a las anteriores, porque sus padres están alfabetizados, consideró la funcionaria.

Otro tema que preocupa a la SEP es la escasez de materiales escritos en México que estén dirigidos a los niños. Dijo que esto la llevó a sostener pláticas con representantes de la Cámara Nacional de la Industria Editorial, sobre la importancia de que haya más obras nacionales y no sólo traducciones.

Señaló que las traducciones son importantes y no se trata de que toda la biblioteca de aula esté escrita en México, porque si sucediera así se cometería un "crimen" con los niños al no darles acceso a la literatura universal, pero consideró que sí debe haber más libros de autores mexicanos.

Afirmó que existen pocos libros de teatro infantil, de tipo informativo y de géneros periodísticos como el reportaje y la crónica, así como de materiales dirigidos a alumnos de 6 o 7 años de edad. Aseveró que han encontrado que a los autores mexicanos les cuesta trabajo encontrar el tono al público infantil, lo cual, consideró, es comprensible porque "escribir para niños es muy difícil y quien crea que es cosa trivial está en un gran error".

Indicó que este año se van a incorporar 16 títulos nuevos, con lo que va a sumar 76 el número de textos que se encuentren en los estantes de cada salón de clases.

Anunció que el proceso de selección de este año ya se inició y entraron a concurso 14 mil títulos, mil más que el año pasado. En total, se espera la participación de 16 mil personas de todo el país en el proceso de selección.

Además, expresó que se iniciaron pláticas con el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación para que este organismo pueda hacer un estudio sobre el uso e impacto que tienen los libros de las bibliotecas de aula en los alumnos.