México D.F. Sábado 29 de mayo de 2004
El gobierno local presentará al INAH
los argumentos que justifican el proyecto
Tiene sustento histórico la reubicación
del monumento a Cuauhtémoc
Hallazgos arqueológicos recientes demuestran
que volverá a su sitio original: autoridades
LAURA GOMEZ FLORES
La Secretaría de Turismo del DF presentará
al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) los argumentos
que justifican la reubicación del monumento a Cuauhtémoc
en su posición original, para que libere el permiso correspondiente.
El proyecto se sustenta en los descubrimientos realizados durante las excavaciones
en la zona, donde se encontró la cimentación original y las
viguetas que sostenían el monumento en 1887.
A
dicha prueba arqueológica, que echa por tierra la inconformidad
de la agrupación ciudadana Salvemos Reforma, se agrega la placa
de bronce que se puso durante la gestión del regente Fernando Casas
Alemán, en 1949, donde se asienta el cambio de ubicación,
88 metros hacia el poniente, donde ha permanecido hasta la fecha, adelantó
el director de Programas Estratégicos de la secretaría, Francisco
Ruiz Herrera.
Durante un recorrido a realizarse el próximo martes
por la zona se mostrará dicho hallazgo y la placa a funcionarios
del INAH, en un acto encabezado por la titular de Turismo, Julieta Campos,
representantes de la Secretaría de Obras y la empresa CAV Diseño
e Ingeniería, encargada de la cimentación y restauración
de las piezas del monumento, indicó el funcionario.
En entrevista, el funcionario explicó que durante
los trabajos de excavación para estudiar los cimientos y basamentos
en el área donde será colocado el monumento, se descubrió
la cimentación original, con una antigüedad de 120 años,
que incluyen unas escaleras, lo cual "es una prueba ineludible de que estamos
diciendo la verdad, lo cual está certificado por personal del Instituto
Nacional de Bellas Artes".
Además, la placa conmemorativa de la reubicación
del monumento a Cuauhtémoc, durante la presidencia de Miguel Alemán,
"se verificará que no estamos transgrediendo la Ley Federal de Monumentos
y no existe fundamento histórico o jurídico para detener
los trabajos, que forman parte de la tercera etapa de remozamiento de Paseo
de la Reforma, que esperamos concluir en el tercer trimestre del año".
Indicó que el inicio del traslado dependerá
de la expedición del permiso por parte del INAH; estimó que
los trabajos tardarán entre cinco y seis semanas. Las maniobras
son difíciles, reconoció Ruiz Herrera, porque el monumento
pesa 378 toneladas, por lo cual se analiza utilizar dos grúas y
un sistema de rayos láser para garantizar su equilibrio mientras
es asentado.
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