"El optimismo es irreal, producto de mala información"

El Presidente debe poner los pies en la tierra y ver la realidad: CAP

MATILDE PEREZ U.

Al Congreso Agrario Permanente (CAP) no le corresponde realizar una rectificación en la política agropecuaria, "eso es deber del presidente Vicente Fox; él tiene que poner los pies en la tierra para ver y comprender la realidad del campo", señaló Federico Ovalle Vaquera, coordinador en turno de la agrupación.

Durante la celebración del 15 aniversario del CAP, Ovalle Vaquera asentó que el optimismo del Presidente de que el sector agropecuario tiene un crecimiento de 5 por ciento es irreal y producto de la mala información que le proporcionan sus colaboradores. "La pobreza, marginación e incremento de la migración están allí, son realidades específicas, y trata de minimizarlas al hablar de que unos pasan de la extrema pobreza a la pobreza".

El dirigente agrario no negó que algunos campesinos, desesperados por la miseria y marginación en la que viven, se contratan como sembradores de droga o bien rentan sus tierras a narcotraficantes, como acontece en algunas regiones de Guerrero y Chihuahua, pero "son los menos y no existe ningún riesgo de que el campo se colombianice. Corresponde al gobierno federal responder a esa falta de desarrollo y evitar que la desesperación llegue a expresarse en actos de violencia".

Por ello, abundó, el CAP seguirá presionando para que se cambie la política hacia el campo, que se revise el capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y se proceda, a la brevedad, a sacar de ese y otros acuerdos al maíz y frijol, productos que son la base productiva de 3 millones de campesinos.

Demandas persistentes

Agregó que desde la constitución del CAP las demandas han sido: entrega de financiamiento; un mercado equilibrado; respaldo -no paternalismo ni reparto de migajas- para lograr el desarrollo del agro; apoyos para proteger y aprovechar el ámbito natural; educación y empleo.

Han transcurrido 15 años y las demandas campesinas no han cambiado, y ahora el CAP tiene que revalorar el pacto político que le dio origen. "Las organizaciones que lo conforman seguirán siendo respetuosas, pero exigirán que se atienda el campo", afirmó Ovalle Vaquera.

Durante la celebración, Javier Gil Castañeda, ex dirigente de la Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas (UNORCA) y fundador del CAP, hizo un llamado a los campesinos a mantener la unidad y su voluntad de organización ante un contexto adverso.

El CAP, afirmó, no es ajeno a la problemática campesina: asume sus luchas y retos.