Quiere ser puente para contactar a comandancia del EZLN

La Cocopa se reunirá mañana con partes en conflicto en Chiapas

ENRIQUE MENDEZ

Con la intención de dar un paso para la reanudación del diálogo de paz con el EZLN, la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) se reunirá este miércoles con el gobernador de Chiapas; el comisionado gubernamental Luis H. Alvarez; el obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi, y los diputados locales. Sin embargo, desde ayer surgieron las primeras diferencias sobre cómo retomar las pláticas que permitan resolver el conflicto en aquella entidad.

El presidente en turno de la Cocopa, el panista Luis Esteva, afirmó que la revisión a la Ley de Derechos y Cultura Indígenas no es el único camino para la solución al conflicto en esa entidad, mientras que la representación perredista señaló que volver a discutir en el Congreso la reforma indígena es una condición necesaria para volver a una mesa de diálogo.

El diputado perredista Gerardo Ulloa Pérez señaló que después del viaje de la comisión a Chiapas se hará un exhorto al presidente Vicente Fox para que invite a todas las partes involucradas a restablecer la negociación de una paz duradera.

El legislador confió en que la Cocopa pueda constituirse como "puente para establecer contacto con la comandancia zapatista, ver la disponibilidad del movimiento al diálogo y una respuesta positiva de ellos.

"Además debemos atender inmediatamente la situación social, los problemas de los desplazados, los proyectos de las comunidades indígenas, darle salida a los conflictos agrarios y a las diferencias que existen entre los municipios por tierra y agua", declaró.

Su compañero de bancada, Bernardino Ramos Iturbide, también integrante de la comisión, resaltó que se busca además contar con una "radiografía de los focos rojos" en la entidad, que en los años recientes han derivado en confrontaciones por conflictos partidistas, religiosos, por la tierra, el agua y los desplazamientos.

Afirmó que la instancia legislativa busca iniciar una nueva etapa de diálogo para Chiapas, volver a poner en primer plano la situación de marginación de los pueblos indios y el riesgo latente de violencia por el largo periodo en que se ha mantenido roto el diálogo entre el gobierno y el EZLN.

En su opinión, la falta de una reforma indígena que dé respuesta a las demandas de las comunidades ha encendido una serie de "focos rojos", aun cuando en 10 años "no ha habido una confrontación armada".

Para Bernardino Ramos, en este momento sería difícil conciliar un encuentro con el EZLN, por la falta de diálogo. "Sin embargo, esperamos sentar las bases, crear las condiciones, manifestar nuestra voluntad por una nueva reforma indígena, para acercar a los involucrados a una mesa de negociación", dijo.

Mientras, el diputado panista Luis Esteva Melchor indicó que la Cocopa realizará un análisis sobre la situación en la entidad y hará lo posible por servir de interlocutora para la reanudación del diálogo.

Consideró que hay quienes piensan que al modificar las reformas constitucionales en materia de derechos y cultura indígenas de 2001 se tendrían elementos para que el EZLN reanude el diálogo. "Sin embargo, no sólo ese es el camino, por lo que la visita a Chiapas ayudará a tener conocimiento pleno de la situación en el estado", expresó.