México D.F. Miércoles 19 de mayo de 2004
La investigadora Lourdes Arizpe propone impulsar
programa de rescate de la UNESCO
Las tendencias de la globalización amenazan
al patrimonio intangible
Apuntalar la creatividad cultural y sacarle provecho
económico, reto para América Latina, afirma El léxico
constituye el inventario del ser cultural de un pueblo, asegura León
Portilla
FABIOLA PALAPA QUIJAS
Innumerables
tendencias de la globalización como los cambios en los patrones
de consumo, la migración y la industria publicitaria están
amenazando el patrimonio intangible, señaló ayer Lourdes
Arizpe, presidenta del Consejo Internacional de Ciencias Sociales e investigadora
de la UNAM, durante el coloquio El patrimonio intangible y los museos en
México.
El historiador Miguel León Portilla consideró
a las lenguas indígenas dentro del patrimonio intangible porque
hacen posible la comunicación, a través de sus fonemas, estructuras
morfológicas, sintácticas y semánticas.
Ante las tendencias que marcaban la destrucción
del patrimonio intangible, Lourdes Arizpe impulsó la revitalización
de un programa sobre los bienes culturales en la UNESCO (Organización
de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura).
"El primer paso consistió en la creación
del programa Proclamación de obras maestras del patrimonio oral
e intangible, el cual ha llamado la atención de los gobiernos
y el público ante de la necesidad de salvaguardar este tipo de patrimonio",
indicó Arizpe.
La investigadora definió al patrimonio cultural
intangible como "las prácticas y representaciones -junto con su
conocimiento, habilidades, instrumentos, objetos, artefactos y sitios-
que las comunidades e individuos reconocen y que son consistentes con los
principios universalmente aceptados en relación con los derechos
humanos, la equidad, la sustentabilidad y el respeto mutuo entre comunidades
culturales".
El reto para la región
El
desafío en América Latina y el Caribe en cuanto a los bienes
culturales intangibles "consiste en encontrar estrategias en dos direcciones:
proteger e impulsar la creatividad cultural y lograr beneficios económicos
con el turismo cultural".
Crear redes de significados que hacen valioso el patrimonio
intangible es el reto de la comunidad museográfica. "Hay que abrir
un cauce de participación para que los jóvenes, los artistas,
los antropólogos, los historiadores, las mujeres, los indígenas
y los propios investigadores y trabajadores del Instituto Nacional de Antropología
e Historia, así como instituciones afines, contribuyan a renovar
el pensamiento sobre el patrimonio cultural", finalizó.
En su intervención, León Portilla enumeró
algunos bienes culturales intangibles como las lenguas habladas en determinados
lugares y tiempos; afirmó que el léxico constituye el inventario
del ser cultural de un pueblo.
Dentro de lo intangible mencionó las creaciones
literarias: cantos, poesía, narrativa y relatos históricos,
entre otros. "Su presencia en un museo, solas o al lado de objetos tangibles,
puede despertar interés incalculable, haciendo posible su disfrute
de variadas formas", indicó el historiador.
Valiéndose de grabaciones, dijo León Portilla,
y registros visuales podrán mostrarse las principales características
fonológicas, morfológicas, sintácticas y semánticas
de la lengua en cuestión. Así, los visitantes conocerán
la peculiaridad del habla de quienes fueron los creadores de las manifestaciones
artísticas y religiosas.
Concluyó: "al acercarnos a los bienes culturales
intangibles alcanzaremos percepción y disfrutes más plenos.
Empleando la terminología tradicional, si los humanos somos materia
y espíritu, parece obvio que busquemos acercarnos a las creaciones
humanas abriéndonos a ellas cabalmente a través de todos
los recursos".
El coloquio El patrimonio intangible y los museos en México,
coordinado por Ana Rosas Mantecón, se desarrolló este martes
en el Museo Nacional de Antropología, en el contexto de la celebración
del Día Internacional de los Museos.
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