Se unen la ASF y la CMH para combatir la corrupción

Refuerzan acciones para fiscalizar el gobierno de López Obrador

RAUL LLANOS SAMANIEGO

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) y la Contaduría Mayor de Hacienda (CMH) de la Asamblea Legislativa firmaron ayer un acuerdo para fiscalizar los recursos federales que recibe el gobierno de la ciudad, y establecieron el compromiso de cerrar los reductos a la corrupción.

Durante el acto, realizado en las oficinas de la ASF, la presidenta de la CMH, María de la Luz Mijangos, dejó en claro que "la corrupción y sus derivados: soborno, clientelismo y patrimonialismo, han socavado los intereses colectivos, dañado la credibilidad y confianza ciudadana en el Estado y en el sistema político en su conjunto, por ende la corrupción no puede tener cabida en el México de hoy y del futuro".

Mijangos, quien en unos días terminará su gestión en el órgano de fiscalización de la ALDF, añadió que en el discurso contra ese cáncer social todos están de acuerdo, pero se debe pasar de las palabras a los hechos.

Ahora más que nunca, sostuvo, cuando los escándalos de corrupción política se han hecho más evidentes, los órganos de fiscalización deben redoblar su tarea y poner énfasis en la acción preventiva y coactiva hacia cada peso que se erogue del erario.

La contadora fue directa al considerar que ante el panorama político actual "no podemos permitir que triunfen el cinismo, la desvergüenza, o el pesimismo (...) no podemos ni se nos permitiría socialmente desfallecer y permanecer impasible ante los contextos de impunidad", por lo que se debe profundizar en la rendición de cuentas.

El presidente de la ASF, Arturo González de Aragón, mencionó que la finalidad del actuar de los órganos técnicos es garantizar su neutralidad, evitar presiones y orientaciones políticas de intereses partidistas o particulares que pretendan desviar los resultados de su actuación.

Comentó que se han conocido señalamientos de que algunos órganos de fiscalización se han convertido en instrumentos de poder y acoso político en lugar de actuar como revisores de la legalidad de los actos de gobierno.

Pablo Trejo, presidente de la Comisión de Vigilancia de la ALDF, detalló que con el acuerdo signado se revisarán las cuentas públicas de 2002 y 2003 específicamente en lo que se refiere a las participaciones y transferencias federales, como las del ramo 33.

Lorena Villavicencio, presidenta en funciones de la Comisión de Gobierno, reconoció que mediante los medios la ciudadanía se ha enterado de escándalos políticos "que nos hablan de una franja muy amplia de corrupción que lamentablemente existe en este país y en esta ciudad. Hablamos de franja de impunidad, que evidentemente es el binomio perfecto: la impunidad y la corrupción, y me parece que en esta circunstancia estamos obligados a reforzar todos los mecanismos que hagan de la actividad pública una actividad transparente donde la rendición de cuentas sea principio fundamental."