México D.F. Martes 30 de marzo de 2004
El poder democrático no debe usarse para
satisfacer caprichos o para incurrir en corrupción, dice
Envía Fox al Congreso la iniciativa de reforma
al sistema de justicia
La propuesta del mandatario descansa sobre tres pilares:
restructurar orgánicamente las instituciones de seguridad pública,
transformar el procedimiento penal y profesionalizar la defensa
ROSA ELVIRA VARGAS Y JESUS ARANDA
Al
formalizar su anunciada iniciativa de reforma al sistema de seguridad pública
y justicia penal, el presidente Vicente Fox Quesada estableció que
el poder democrático debe usarse para atender las necesidades de
la comunidad y no para satisfacer caprichos personales o para incurrir
en actos de corrupción.
Expuso además que su propuesta descansa sobre tres
pilares: restructurar orgánicamente las instituciones de seguridad
pública, transformar el procedimiento penal y profesionalizar la
defensa penal.
Para el mandatario, el diseño de esta modificación
legal a los ordenamientos en la materia se justifica por la manifiesta
insatisfacción de la sociedad en los niveles de seguridad y de justicia
penal, donde las instituciones responsables ''presentan un diseño
con profundas fallas estructurales''. Corregirlas, expuso el mandatario,
requiere de cambios en la Constitución y en algunas leyes federales,
con el fin de ''reformular el sistema en su conjunto''.
En la residencia oficial de Los Pinos, el Presidente signó
la iniciativa que ayer mismo envió al Congreso de la Unión.
En el mismo acto entregó un ejemplar al presidente de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Mariano Azuela, quien apuntó
que el Poder Judicial está consciente de que al preparar este proyecto
el Ejecutivo ''ha analizado con toda acuciosidad (sic) lo que conviene
al pueblo de México'' .
Aunque el presidente Vicente Fox precisó que su
propuesta es ''complementaria'' de la consulta que realiza el Poder Judicial
desde hace varios meses -que concluirá en agosto-, hay que destacar
que la iniciativa que en su momento elabore la Suprema Corte en materia
de justicia penal difícilmente sería tomada en cuenta por
el Congreso si para entonces ya se hubiese aprobado la enviada por el titular
del Ejecutivo.
Alcances de la propuesta
El presidente Fox enunció la pretensión
de la reforma: unificar policías e incrementar su capacidad para
combatir los delitos, y que la labor de investigación quede a cargo
de una nueva policía federal al mando de una secretaría del
interior, que sería el resultado de fusionar la Agencia Federal
de Investigación (AFI) y la Policía Federal Preventiva (PFP).
Transformaría además a la Procuraduría General de
la República (PGR) en una fiscalía general de la Federación
para de ese modo lograr que la autoridad que dirija la indagatoria ''actúe
con estricto apego a la ley, sin consideraciones de carácter político''.
De esa forma, a los fiscales del Ministerio Público
correspondería dirigir la investigación de los delitos en
su calidad de peritos en derecho, al tiempo que litigan los casos ante
los jueces, pero ''sin realizar funciones de investigación policial''.
Se proponen cambios también en el sistema procesal vigente por otros
que garanticen la presunción de inocencia, juicios rápidos
y equilibrados, orales, transparentes y públicos.
Transformar el proceso penal, expuso el mandatario, permitirá
que la verdad surja de la deliberación equilibrada entre la fiscalía
y la defensa ante jueces imparciales, desterrando los rasgos inquisitivos
que aún persisten.
Se trata en síntesis de una propuesta que, a decir
de Fox Quesada, responde a los reclamos que por décadas ha expresado
la ciudadanía para tener un sistema de justicia penal ''confiable,
rápido, eficaz y transparente''.
Lucha desigual
Por su parte, el procurador Rafael Macedo de la Concha,
en su prolija justificación a la propuesta, habló de nuevo
de la lucha desigual que se libra contra la delincuencia, pues los malhechores
encuentran espacios para la impunidad y no existe coordinación adecuada
entre los cuerpos de seguridad y de procuración de justicia.
La sociedad, subrayó, exige una justicia sin matices.
Y dijo que ''de una buena vez'' precisaría que en ningún
momento el Presidente de la República ''ha girado alguna línea
o ha propiciado alguna consigna para lastimar, lesionar o torcer el rumbo
de la ley''.
En la ceremonia también habló el secretario
de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero.
|