El instituto quebrará si no reforma su sistema de pensiones, dice el organismo cúpula

La Secretaría del Trabajo debe mediar en el conflicto del Seguro Social: CCE

ANTONIO CASTELLANOS

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) pidió a la Secretaría del Trabajo que intervenga para resolver el conflicto financiero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) e hizo un llamado al sindicato de esa institución y a las autoridades administrativas para cumplir los compromisos acordados. Precisó que el deterioro del IMSS es creciente y pone en riesgo a cerca de 800 mil empresas.

El presidente del CCE, Héctor Rangel Domene, y el dirigente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Luis Barraza, expresaron su confianza en que la administración del Seguro Social y el sindicato lleguen a un acuerdo antes de que se cumpla el plazo el 1Ɔ de abril. Una situación contraria llevaría a la quiebra técnica del instituto, en perjuicio de más de 45 millones de personas que reciben atención médica.

Por esa razón, consideraron, es urgente que las autoridades de la Secretaría del Trabajo, a cargo de Carlos Abascal Carranza, intervengan para mediar en el asunto que se ha convertido en una "bomba de tiempo". El aumento en las cuotas se sumaría a las cargas que ya tienen las empresas, como es el Infonavit y los diversos impuestos que tienen que cubri, lo que/ provocaría el cierre de empresas.

El CCE expuso que el sector empresarial manifiesta su profunda preocupación por el estado que guardan las finanzas del IMSS. Es inviable mantener este sistema que permite a los trabajadores del instituto retirarse a los 27 o 28 años de labores sin importar su edad, cuando la expectativa de vida en México se ha incrementado a 75 años en promedio. Lo anterior da como resultado una pensión excesivamente larga y costosa, más todavía cuando esta prestación es dinámica y 40 por ciento superior al último sueldo cobrado en activo.

Insistió en que la pretensión de resolver este problema por la vía de un incremento a las cuotas obrero-patronales, orientado a mantener una situación de privilegio para los miembros del sindicato, es inaceptable por injusta.

Esta medida afectaría a cerca de 800 mil empresas registradas en el IMSS -en su mayoría pequeñas-, y a sus trabajadores, quienes ni cercanamente gozan de prestaciones equiparables, además de que provocaría la desafiliación y pérdida de empleo formal, según el CCE.

Los economistas del organismo cúpula patronal recordaron que en octubre de 2003 el IMSS y su sindicato pactaron reformar el Régimen de Jubilaciones y Pensiones (RJP) para que entrara en vigor a partir del 1Ɔ de abril del presente año. La difícil situación del instituto se origina en buena medida por este régimen.

Sin embargo, el sindicato aún no ha cumplido con su compromiso, al haber presentado una propuesta insuficiente e inaceptable para las tres partes que conforman el instituto; los empresarios, los trabajadores y el gobierno federal han manifestado su rechazo a ésta por diversos medios.

Los empresarios agrupados en el CCE exhortaron a la administración del instituto y a la dirigencia sindical a alcanzar un acuerdo que modifique el RJP que debe preservar la salud financiera del IMSS a fin de aportar condiciones que mejoren la calidad en los servicios de seguridad social.