México D.F. Domingo 28 de marzo de 2004
Sin freno, disputas por el pasaje entre Autobuses Teotihuacán-Chipiltepec y Valle de México
Botín de transportistas, las rutas que confluyen en el Metro Ciudad Azteca
JAVIER SALINAS CESAREO CORRESPONSAL
Acolman, Mex., 27 de marzo. El control por las rutas de transporte que confluyen en la terminal Ciudad Azteca de la línea B del Metro, se ha convertido en botín de las líneas de camiones de servicio público de la zona, que en sus disputas han mantenido como rehenes a los cientos de usuarios que diariamente requieren el servicio.
Las pugnas y enfrentamientos que han protagonizado los consorcios Autobuses Teotihuacán-Chipiltepec y Valle de México son frecuentes y las autoridades de transporte mexiquenses no intervienen para poner orden.
En diciembre de 2000 las autoridades del Distrito Federal pusieron en marcha la línea B; desde entonces, decenas de unidades de transporte llegaron a la terminal Ciudad Azteca a prestar el servicio a los usuarios.
Fueron abiertas varias rutas hacia Tlalnepantla, Ecatepec y a diferentes unidades habitacionales, principalmente controladas por la línea Valle de México, quien ha pretendido monopolizar el servicio.
En diciembre pasado, las autoridades de transporte terrestre del estado otorgaron otra concesión a la línea Autobuses Teotihuacán-Chipiltepec para abrir el derrotero Ciudad Azteca-Otumba-Ciudad Sahagún.
La autorización, firmada por José Jacobo Jiménez, director general de Operaciones de la zona tres de Transporte Terrestre, fue debida a la necesidad de cientos de usuarios que diariamente viajan desde los municipios de Acolman, Teotihuacán, San Martín de las Pirámides, Otumba o Ciudad Sahagún hasta el Metro Ciudad Azteca.
Roberto Gabriel González Bistraín, secretario general de Autobuses Teotihuacán, señaló que con el nuevo derrotero, unos 15 mil usuarios que viajan de dichos municipios a la citada estación del Metro, que tienen que pagar al menos tres pasajes por los transbordos, sólo pagarán uno.
Los choferes de la línea Valle de México se niegan a respetar la concesión que otorgaron las autoridades del estado de México a sus homólogos y en repetidas ocasiones han evitado su paso violentamente por la Avenida Central. A su vez la Teotihuacán han hecho lo mismo pero en Tepexpan, en la entrada de la autopista México-Pirámides.
En repetidas ocasiones ambos bandos se han enfrentado; la última disputa ocurrió el pasado 16 de febrero, cuando siete unidades teotihuacanas fueron destrozadas y varios conductores resultaron lesionados.
Apenas ayer viernes, unos 150 choferes de la Teotihuacán-Chipiltepec se plantaron en el entronque de Tepexpan e impidieron el paso a sus competidores. En respuesta, los choferes de la línea Valle de México destrozaron una unidad cuando circulaba en la carretera Texcoco-Lechería.
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