JAZZ

Antonio Malacara

Sergio Ayluardo (1972-2004)

SERGIO AYLUARDO, PIANISTA, falleció el pasado 9 de marzo, a los 31 años de edad, en la tranquilidad de su casa. Después de luchar durante dos años, el cáncer que lo aquejaba vía metástasis, terminó instalándose en los pulmones. Las versiones de familiares y amigos cercanos coinciden en que Sergio enfrentó su enfermedad, hasta el final, sin lamentaciones y con un sorprendente valor.

HACE MENOS DE un mes, a mediados de febrero, Sergio había regresado de la ciudad de San Francisco, California, donde había ofrecido una última serie de conciertos invitado por el bajista Alejandro Loyola, con quien también realizó una temporada en 2002-2003 como grupo base del bar New Orleans; en ese entonces, el maestro Juan Ramón II se encargaba de la batería.

SERGIO AYLUARDO RUIZ-GOMAR nació en la ciudad de México el 15 de septiembre de 1972. Hijo de los profesores Edith Ruiz-Gomar y Sergio Luis Ayluardo, se vio siempre rodeado por las atmósferas del arte y la cultura; Sus abuelos y tíos eran pianistas empíricos, por lo que a los siete años Sergio recibió un piano y las primeras lecciones por parte de doña María Luisa Campos, su abuela materna.

EN 1991 DECIDIO dedicarse de lleno a la música, por lo que ingresó a la Escuela Superior de Música y posteriormente tomó un curso especial de armonía con Jorge Pérez Ferrat (hijo del maestro Roberto Pérez Vázquez, pianista y director de los Violines de Villafontana). Más adelante, tomaría cursos de técnica y aplicación de lectura a primera vista con el maestro Pedro Alejos.

DOMICILIADO EN ACUEDUCTO de Guadalupe, Sergio trabajó recurrentemente como solista en bares y clubes del norte de la ciudad, en Lindavista, Robles Domínguez y Naucalpan. Formó parte del grupo Flamingo y del de Pepe Carioca; realizando además una larga temporada con la célebre banda Old Days, dirigida por Raúl González Pliego e interpretando standars y música de Blood, Sweat & Tears.

AUNQUE YA PUESTOS a escoger, Sergio Ayluardo gustaba de interpretar la música de Cole Porter, Duke Ellington y Michel Legrand, o de latinoamericanos como Antonio Carlos Jobim y Michel Camilo. En los terrenos de la localidad, sus pasiones iban de Mario Ruiz Armengol a Agustín Lara, de Luis Arcaraz a Alvaro Carrillo, o de María Grever a Consuelo Velásquez.

FINALIZANDO LOS AÑOS 90, se fue a radicar a Cancún y ahí formó un trío con el excelente baterista Jesús Vargas y con la cantante Rubí, con quienes deambuló durante casi tres años por los principales foros de Quintana Roo. A su regreso al DF fue cuando hizo la temporada en el New Orleáns y cuando el circuito del jazz en México lo empezó a descubrir como un joven y talentoso maestro.

POR ALLA NOS vemos.

DE ULTIMA HORA, nos informan que acaba de aparecer un disco póstumo del músico, titulado Piano y sintetizador.