No se pondrá en riesgo la recuperación, señala

Reafirma Argentina oferta de reducir 75 por ciento su deuda en moratoria

AFP Y REUTERS

Buenos Aires, 21 de marzo. El gobierno argentino reafirmó su oferta de reducir de manera drástica (75 por ciento) la deuda en moratoria, y excluyó para los nuevos bonos un tentador rendimiento adicional de 15 por ciento por el repunte de la economía, pese a la presión en favor de los acreedores que ejerce el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyo directorio evaluará este lunes si aprueba la segunda revisión del programa económico de 13 mil 300 millones de dólares que tiene con Buenos Aires.

Argentina se rehusará a mejorar el ofrecimiento para no poner en peligro la recuperación del país tras el colapso de finales de 2001, mientras confía en que la dura postura no impida que el FMI apruebe la segunda revisión del acuerdo en vigor.

El fondo había puesto como condición el registro de avances en la negociación con los acreedores para renovar la ayuda que no implica dinero fresco, sino la refinanciación de las deudas con organismos multilaterales a tres años.

El ministro de Economía, Roberto Lavagna, dijo al diario Clarín: "de ninguna manera" se va a incluir el aumento de 8.7 por ciento del producto interno bruto (PIB) en 2003 para los cupones de los títulos que serán emitidos a cambio de los viejos que están en default, por unos 81 mil millones de dólares.

"Eso no va a ser así. Se va a tomar el aumento del PIB a partir del momento en que se haga el canje, que sería a partir de la segunda mitad de este año. Pero sería lógico incorporar el crecimiento que se logre a partir de 2005", señaló Lavagna. También desechó que en el rendimiento de los futuros papeles se considere incluir un ajuste de 5.5 por ciento por el crecimiento previsto de la economía en 2004.

En vísperas del inicio del diálogo con grupos de acreedores en Buenos Aires, el ministro reconoció que "algún dato adicional va a haber" para los poseedores de bonos, al margen de la oferta global de reducción de 75 por ciento de la deuda, lanzada el año pasado en Dubai en la asamblea del FMI.

Pero al ser consultado sobre si el cupón atado al crecimiento va a estar incorporado a todos los bonos, declaró que será "un tema a discutir". "En algunos será optativo, pero está claro que no habrá cupón en el bono a la par porque ese título no tiene pérdida de valor", agregó.

Los acreedores del país, con apoyo del FMI y del Grupo de los Siete (G-7) países más desarrollados, han rechazado de plano la oferta, pero el gobierno les había lanzado el anzuelo de vincular el rendimiento de los futuros bonos al crecimiento.

Si Argentina crece en forma sostenida, los intereses de los nuevos instrumentos podrían ofrecer un mejor rendimiento a los inversionistas.

En caso contrario, los bonistas, en su mayoría tenedores locales, italianos, estadunidenses y japoneses, deberían aceptar que se les pague 25 por ciento del valor nominal, a un plazo máximo de 42 años y una tasa no superior a 5 por ciento, sin adicionales.

"De mayo de 2002 hasta el año actual tuvimos 54 reuniones con acreedores de seis o siete países. Y vamos a continuar el diálogo. Progresivamente se van despejando dudas. Lo básico, que era estabilizar la situación y lograr el acuerdo con los organismos multilaterales, ya está", dijo Lavagna.