México D.F. Miércoles 17 de marzo de 2004
MEXICO SA
Carlos Fernández-Vega
La revolución silenciosa de Fox, o la privatización escandalosa de Pemex
El gasto se desplomó mientras creció 161.5% la inversión vía Pidiregas
EN VISPERAS DEL ACTO conmemorativo de la expropiación petrolera, el presidente Vicente Fox no pudo escoger peor plaza para presumir su "revolución silenciosa" en ese Petróleos Mexicanos (Pemex) que, dice, "no se desincorpora, no se privatiza y no se concesiona": la cuenca gasífera de Burgos, hoy controlada y explotada por capital trasnacional a la que tuvo acceso mediante los ilegales "contratos de servicios múltiples".
EL ORONDO INQUILINO DE Los Pinos viajó ayer a Tamaulipas, donde aseguró que en el primer trienio de su mandato se ha registrado "una verdadera revolución silenciosa en Pemex. Mi gobierno en estos tres años ha quintuplicado, ha multiplicado por cinco veces el presupuesto anual dedicado a exploración, y estamos en camino de aumentar la tasa de reposición de reservas, que había caído peligrosamente a un nivel de 20 a 25 por ciento, a fin de regresarla a una tasa de reposición anual que esperamos alcanzar para el año 2006 en materia de reservas de 100 por ciento".
EN LOS HECHOS, la mencionada "revolución silenciosa" no ha sido más que la privatización escandalosa del sector energético nacional, mientras la presumida multiplicación de los panes se estrella con una cada vez más onerosa realidad -en beneficio del capital trasnacional- que tiene rostro de Pidiregas (Proyectos de Infraestructura Productiva con Impacto Diferido en el Registro del Gasto).
LEJOS, MUY LEJOS, DE la milagrosa "quintuplicación" presumida por el guanajuatense, información de la propia paraestatal revela que en el primer trienio del "cambio" el gasto presupuestal canalizado a Pemex se desplomó casi 37 por ciento, mientras la inversión vía Pidiregas creció un explosivo 161.5 por ciento.
EN 2001, PRIMER AÑO de la administración foxista, de los 6 mil 900 millones de dólares que se invirtieron en Petróleos Mexicanos, 3 mil millones (43.48 por ciento del total) salieron del presupuesto de egresos, y los 3 mil 900 millones (56.52 por ciento) restantes provinieron de Pidiregas, léase capital trasnacional sin mayor ambición que contribuir a la "revolución silenciosa" de Vicente Fox.
UN AÑO DESPUES, la inversión en la paraestatal sumó 7 mil 800 millones de dólares, de los que 2 mil 200 millones (28.2 por ciento del total) provinieron del presupuesto de egresos de la federación y 5 mil 600 millones (71.8 por ciento) de Pidiregas, siempre con el mismo afán de fortalecer a Pemex.
PARA CELEBRAR EL PRIMER trienio en el gobierno, en 2003 dicha inversión sumó 12 mil 100 millones de dólares, de los que mil 900 millones (15.7 por ciento del total) salieron de las arcas nacionales y 10 mil 200 millones (84.3 por ciento) de Pidiregas, consolidando la "revolución silenciosa" o si se prefiere la privatización escandalosa.
LA PARTICIPACION DEL capital extranjero vía Pidiregas fue autorizada en el zedillato, y en su primer año de ejercicio (1998) se avaló una inversión de 2 mil millones de dólares, contra 3 mil 100 millones de recursos presupuestales, es decir que de cada peso 39 centavos correspondieron a los dineros trasnacionales y 61 centavos de las arcas públicas. Hoy, la relación es de casi 85 centavos a 15, lo que explica la "multiplicación" de los panes presumida por el inquilino de Los Pinos.
TAMBIEN ASEGURO QUE "estamos en camino de aumentar la tasa de reposición de reservas que había caído peligrosamente a un nivel de 20 a 25 por ciento, a fin de regresarla a una tasa de reposición anual que esperamos alcanzar para el año 2006 en materia de reservas de 100 por ciento".
QUE BUENO QUE SEA ASI, pero deberá apresurar el paso, porque de acuerdo con información de la Secretaría de Energía y de Pemex a principios de 2003 las reservas totales de hidrocarburos (petróleo crudo, condensados y gas seco) sumaban 50 mil 32 millones de barriles de crudo equivalente, nivel similar al reportado en 1981 y muy alejado de los 72 mil 500 millones registrados en 1984. La relación reservas/producción es de 33 años, de acuerdo con las fuentes referidas.
SIN EMBARGO, EN diciembre pasado el director general de Pemex, Raúl Muñoz Leos, aseguraba que "en la actualidad, México tiene reservas probadas de hidrocarburos por 20 mil millones de barriles de crudo equivalente, dentro de las cuales se incluyen 17 mil millones de barriles de petróleo crudo, líquidos y condensados y 15 millones de millones de pies cúbicos de gas natural... No somos una nación excepcionalmente privilegiada en cuanto a nuestra disposición de reservas, pero tenemos todavía grandes posibilidades de desarrollo, porque nuestros trabajos exploratorios sólo han cubierto una pequeña parte de las áreas susceptibles de contener hidrocarburos".
EN LA CUENCA DE BURGOS el creativo presidente Fox también refirió que ante la falta de inversión en la paraestatal, "al iniciar este gobierno nos propusimos revertir la situación, nos propusimos cambiar de manera radical, modernizar y revitalizar a Pemex, convertirlo en una verdadera re-energización de Pemex y del petróleo, para lograr la re-energización de la economía nacional".
PARECE QUE EL INQUILINO de Los Pinos no pudo esperar la fecha precisa para conmemorar la expropiación cardenista del petróleo y ayer aseguró que "queremos un Pemex fuerte, queremos un Pemex creciendo, queremos un Pemex siendo la palanca del desarrollo del país, un Pemex aportando al presupuesto y al desarrollo de capital humano", que se mantenga como responsable de aportar 40 por ciento de los recursos presupuestales, según sus cálculos.
COMO MUESTRA DE LA expansión de la paraestatal y de su "revolución silenciosa", aunque buena parte de ella corresponda a la participación del capital trasnacional, el presidente Fox detalló que "hay muchos proyectos en marcha", entre ellos Chicontepec, el programa de construcción de plataformas marítimas y la reconfiguración de la refinería Lázaro Cárdenas de Minatitlán, en los que la participación de empresas mexicanas se limita a 25 por ciento; el resto del pastel, para el regocijo de las aplaudidoras trasnacionales.
Las rebanadas del pastel:
TRAS UN MES DE NEGOCIACIONES, Luz y Fuerza del Centro y el Sindicato Mexicano de Electricistas llegaron a un acuerdo, mediante el cual los trabajadores reciben un incremento de 4 por ciento directo al salario y 1.48 por ciento en prestaciones. [email protected]
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