Se presentó la revista M. Museos de México y el mundo

De los mil museos en México, sólo 100 merecen ese estatus

ARTURO JIMENEZ

De las más de mil instituciones que en México se han catalogado como museos, sólo poco más de 100 cuentan con ''las instalaciones, la estructura y las funciones'' que realmente las haría considerarse como tales.

Esa enorme cantidad de museos en el país ha sido ''motivo de orgullo'' e incluso se dice que la ciudad de México es considerada una de las urbes con mayor concentración de esas instituciones en el mundo.

Así lo expresó durante la presentación del número 1 de la revista M. Museos de México y el Mundo el presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales de Museos, Marco Barrera Bassols, para quien la mayoría de esos espacios son ''colecciones en exhibición''.

La presentación de la nueva revista (La Jornada, 11/ III/ 2004), realizada en el auditorio Jaime Torres Bodet del Museo Nacional de Antropología, estuvo encabezada por Sari Bermúdez, presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.

También participaron Sergio Raúl Arroyo y Saúl Juárez, directores de los institutos nacionales de Antropología e Historia y de Bellas Artes, respectivamente, y Miguel Fernández, director de esa publicación impulsada por las tres instituciones.

Los museos, continuó Barrera Bassols, no sólo pueden exhibir, sino realizar tareas de investigación, comunicación y gestión, además de conservación y formación de más y nuevas colecciones, de educación, promoción, experimentación y evaluación, e involucrar a diversos sectores sociales.

Barrera Bassols planteó la necesidad de desarrollar planes y programas para que, en cada caso concreto, esas instituciones fueran mejorando paso a paso en los rubros mencionados, sean museos de gobierno, comunitario, privado o mixto, de carácter nacional, estatal, regional, local o temático.

Es por eso, dijo, que celebra el surgimiento "a contrapelo" de M. Museos de México y el Mundo, revista que recurre a la "diferencia de criterio, diversidad de miradas y opiniones en torno a cómo hacer mejorar el ámbito museológico".

La idea es, agregó, que "nuestros museos proliferen y se fortalezcan junto con el pensamiento, las artes y las ciencias, como espacios, si no ajenos a la política, sí como instituciones en donde radicar nuestra esperanza".