México D.F. Viernes 5 de marzo de 2004
La sociedad civil mexicana, sin acceso a los
medios de comunicación, señalan
ONG exigen al gobierno foxista reforma legal en favor
de las radios comunitarias
Ante representantes de la CIDH censuran la normatividad
nacional en la materia
ALONSO URRUTIA
En
México no existen condiciones para que la sociedad civil tenga acceso
a los medios de comunicación, por lo que, en los hechos, su manejo
se realiza preservando los intereses de algunos sectores económicos
y al amparo de las decisiones discrecionales de la autoridad, sostuvieron
organizaciones no gubernamentales (ONG) ante representantes de la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Durante una reunión efectuada en Washington, encabezada
por el presidente de la CIDH, José Zakalett, y del relator del mismo
organismo en materia de Libertad de Expresión, Eduardo Bertoni,
las ONG demandaron seguimiento para lograr que la administración
foxista tenga una apertura en dicho rubro.
Representantes del capítulo México de la
Asociación Mundial de Radios Comunitarias (Amarc), del Centro por
la Justicia y el Derecho Laboral y de la Comisión Mexicana de Defensa
y Promoción de los Derechos Humanos pidieron que el gobierno foxista
cumpla lo establecido en la convención americana en materia de libertad
de expresión y modifique su legislación, con el objetivo
de favorecer espacios para ejercer efectivamente dicha libertad.
Por el gobierno foxista acudió Juan José
Gómez, director de Derechos Humanos de la cancillería, quien
señaló que las autoridades mexicanas organizaron una mesa
de discusión para la reforma de la legislación en materia
de medios de comunicación. Sin embargo, las organizaciones plantearon
que al final de cuentas la parte oficial atropelló los alcances
de ese diálogo e impuso un decreto que pasó por encima las
demandas sociales.
Al dar a conocer el contenido del encuentro, Aleida Calleja,
de la representación en México de la Amarc, explicó
que el planteamiento central sobre el tema fue censurar la legislación
mexicana, pues no está de acuerdo con los estándares latinoamericanos
para garantizar la libertad de expresión.
Agregó que se propuso que México adecue
su legislación para permitir la presencia de las radios comunitarias
o canales abiertos que garanticen el acceso ciudadano a los medios de comunicación.
Se planteó la situación que prevalece en
las radios comunitarias y la necesidad de reabrir un espacio de diálogo
en el cual discutir la legalización y la adecuación del marco
normativo para su reconocimiento como canales del ejercicio de la libertad
de expresión
Según Calleja, el representante mexicano -"que
extrañamente no fue ninguno proveniente de las secretarías
de Comunicaciones y Transportes o de Gobernación"- reconoció
durante la reunión que el marco legal mexicano no abre espacios
a las radios comunitarias, por lo que en los cierres que han ocurrido se
ha aplicado la legislación nacional.
Las tres ONG pidieron a la CIDH estar cerca del proceso
de diálogo que se abriría en México tras esta audiencia,
para conocer la situación que guardan las radios comunitarias. Asimismo,
demandaron que en el próximo periodo de sesiones se evalúen
los avances de México en el tema.
Pidieron el cese de los cierres de las radios comunitarias
-sobre lo cual no hubo compromiso alguno del gobierno federal- y que el
Ejecutivo mexicano se comprometa a la brevedad a lograr compatibilidad
real entre la legislación y los reglamentos mexicanos con los instrumentos
interamericanos en materia de derechos humanos y la declaración
de principios de libertad de expresión.
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