Líder de la Caricom

"Un precedente peligroso", la salida de Aristide

AFP

Kingston, 3 de marzo. La salida del poder de Jean Bertrand Aristide es un "precedente peligroso", dijo hoy el presidente de la Comunidad de Estados del Caribe (Caricom), Percival Patterson, quien pidió una investigación independiente y advirtió que "no dialogará con ningún grupo que sea contrario a los representantes de la sociedad civil".

El líder caribeño se pronunció por una investigación independiente sobre la partida de Aristide hacia la República Centroafricana, el domingo pasado. "La remoción inconstitucional de cualquier líder no puede ser aceptada", dijo Patterson.

"Lo que ocurrió representa un precedente muy peligroso no sólo para Haití sino para los líderes y gobiernos democráticamente electos en todo el mundo", añadió Patterson, quien habló con Aristide poco antes de su partida al exilio, temprano el domingo.

Patterson dijo que "no hubo nada que indicara que Aristide estaba contemplando la renuncia o que deseara abandonar su decisión de completar su periodo de gobierno que expiraba hasta 2006".

Mientras, los alzados haitianos liderados por Guy Philippe aceptaron hoy deponer las armas bajo presión de Estados Unidos, mientras que continuaba el arribo de contingentes militares extranjeros a Haití.

"Hemos recibido también la garantía de que la democracia será puesta en marcha en Haití" y que el orden "será garantizado", declaró Philippe, quien el martes anterior se autoproclamó "jefe máximo del ejército" y aseguró que no entregaría las armas.

"Nuestro objetivo primordial fue alcanzado, es decir, la partida de Jean Bertrand Aristide del poder", recalcó.

Poco antes, Estados Unidos había aumentado la presión y le hizo llegar el mensaje de que abandone toda ambición de controlar el país o desempeñar un papel en el futuro político haitiano, según una fuente diplomática.

Philippe, quien contribuyó en forma decisiva a la partida de Aristide al tomar bajo su control gran parte del país, dispone de unos 350 hombres armados en Puerto Príncipe.

En los suburbios del sudoeste y este de la capital los intercambios de disparos de fusil entre simpatizantes de Aristide y policías causaron por lo menos tres muertos este miércoles, según testigos.

Estados Unidos efectuó una nueva de-mostración de fuerza al posicionar siete vehículos blindados por la mañana sobre el césped que rodea el palacio nacional en Puerto Príncipe, sede de la presidencia.

Otros vehículos fueron apostados cerca de las oficinas del primer ministro, Yvon Neptune, allegado a Aristide que permanece en Haití. El martes los insurgentes habían afirmado que lo arrestarían para juzgarlo.

Neptune declaró hoy el estado de emergencia, "para restaurar la calma". Una comisión fue formada "para permitir coordinar" medidas de seguridad, que incluirá a miembros de la policía.

Un dirigente opositor dijo que la policía recibió a un nuevo director, Leonce Charles, quien era el comandante de los guardacostas haitianos y colaboraba desde hace años con Estados Unidos en la lucha contra el tráfico de droga internacional.

Aristide se encontraba aún en República Centroafricana, donde se le pidió no hacer declaraciones a la prensa, mientras que Sudáfrica parecía cada vez menos proclive a darle asilo político.