Mujeres desplazadas viven con miedo y zozobra

Distorsionadas, las causas de la matanza de Acteal

Se pretende dar al conflicto un matiz religioso, denuncian

MATILDE PEREZ U.

A seis años de vivir desplazadas, las mujeres de Acteal siguen con el miedo metido en el cuerpo; la zozobra y el temor vuelven a su mente y corazón al saber que varios de los autores intelectuales de la matanza del 22 de diciembre de 1997 podrían salir libres y que el resto de los señalados como responsables del asesinato de 45 personas nunca serán juzgados por ese crimen.

Elena Vázquez Pérez y Catarina Méndez Paciencia, integrantes de la organización Las Abejas, denunciaron que ''el gobierno está maniobrando para distorsionar las causas verdaderas de la matanza de Acteal''. El presidente Vicente Fox desapareció la fiscalía especial y en su lugar creó un grupo de trabajo técnico interinstitucional, a petición de los evangélicos, y ahora -asentaron- pretende convencer a los mexicanos que el conflicto es religioso y no político.

En un comunicado que no pudieron dar a conocer en la presentación del Diagnóstico sobre la situación de las mujeres indígenas desplazadas en el estado de Chiapas, elaborado por Oficina Presidencial para el Desarrollo de Pueblos Indios, las indígenas tzotziles y la mesa directiva de Las Abejas puntualizaron: ''Si hemos señalado a los encarcelados y a los que faltan por ser detenidos es porque cometieron un crimen contra la humanidad, que no es permitido por las leyes de la tierra ni por las leyes divinas''.

Mientras no haya justicia no habrá paz en Chiapas

Destacaron que la ''guerra de baja intensidad'' que viven es el ''medio para mantener militarizado el territorio chiapaneco, desgastar a las comunidades y salvaguardar la riqueza natural que ''tanto interesa a los dueños del dinero''.

En la presentación del informe, en el Museo de Culturas Populares, Martha Figueroa, defensora de mujeres indígenas, advirtió que mientras no haya justicia no habrá paz en Chiapas, y que el conflicto político que hoy se pretende matizar como religioso sólo llevará más violencia a las zonas norte, selva y frontera de ese estado. Las mujeres desplazadas no piden ayudas humanitarias coyunturales, demandan tierra y exigen tranquilidad para volver a caminar solas entre las montañas, sin tener que pedir que las acompañen.

En ese foro, el relator especial de la ONU para los Derechos Humanos y Libertades Fundamentales de los Indígenas, Rodolfo Stavenhagen, habló de la necesidad de que las autoridades reconozcan las diferentes situaciones que conducen al desplazamiento y analicen los problemas para que las políticas públicas estén enfocadas a la solución profunda de las diversas situaciones.

Destacó que hay casos, como el de los desplazados de Acteal, que no se resuelven con ayuda humanitaria coyuntural ni momentánea, porque llega el momento en que las instituciones humanitarias o el gobierno dicen ''ya se acabó (el conflicto), nos retiramos''. Sin embargo, miles de familias desplazadas están en un ''área gris no atendida, invisibilizadas porque no tienen una categoría jurídica reconocida, como los desplazados, situación que afecta sobre todo a las mujeres''.

A su vez, el comisionado del gobierno federal para Chiapas, Luis H. Alvarez, y la titular de la Oficina Presidencial para el Desarrollo de Pueblos Indios, Xóchitl Gálvez, aseguraron que se está aplicando una política pública de atención a los desplazados. Entre las acciones está la conformación de un fondo por 60 millones de pesos, de los cuales 20 millones son para atender a los 10 mil desplazados en el estado de Chiapas, cantidad a la que se suman 20 millones destinados a proyectos productivos y para infraestructura.