Acto en San Lázaro

Temen víctimas de Nazar que salga y continúe impune

ROBERTO GARDUÑO Y JOSE ANTONIO ROMAN

Existe temor de que Miguel Nazar Haro, ex titular de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad, quede libre y la impunidad sobre la guerra sucia persista. "Se demostraría que el gobierno de Vicente Fox no tiene voluntad política o capacidad para actuar", advirtieron representantes de medio centenar de ex presos, secuestrados y exiliados de las décadas de los 60, 70 y 80.

De concretarse la liberación de Nazar, cuya situación jurídica la determinará este miércoles el juez cuarto de distrito con sede en Monterrey, debe exigirse la renuncia del procurador general de la República, Rafael Macedo.

En conferencia de prensa en la Cámara de Diputados, convocada por el PRD, una veintena de luchadores sociales que sufrieron represión dijeron que Nazar Haro es sólo uno de los sujetos que durante las tres décadas referidas incurrieron en delitos de lesa humanidad, como tortura, desaparición forzada y ejecuciones.

Señalaron que todas estas prácticas estuvieron acompañadas por manipulación de la información, con el fin de obtener la aceptación social y asegurar la impunidad, y "se dirigió desde los más altos niveles de decisión política y militar". Además, hubo un amplio aparato operativo que ha contribuido al ocultamiento, situación que beneficia a Nazar Haro en estos momentos.

En la declaración, respaldada por 60 firmas de luchadores sociales, se pregunta por qué hay un solo detenido cuando fueron muchos quienes desde el poder público ejercieron la represión, empezando por el entonces presidente, Luis Echeverría; el secretario de Gobernación, Mario Moya Palencia; el subsecretario de Gobernación, Fernando Gutiérrez Barrios (ya fallecido); el titular de la PGR, Pedro Ojeda Paullada, y el jefe del Departamento del Distrito Federal, Octavio Sentíes.

En la conferencia, varias de las mujeres firmantes del texto relataron parte de lo vivido durante las semanas que duró su detención, en la que fueron sometidas a represión no sólo física, sino sicológica. Incluso hubo aprehensión de familiares y menores de edad, con el propósito de hacerlos confesar sobre sus respectivas organizaciones.

"A la mayoría de quienes fuimos detenidos y desaparecidos se nos confinó posteriormente en diferentes cárceles, sobre todo el Distrito Federal; sin embargo, otros permanecieron en prisiones clandestinas, principalmente en el Campo Militar Número Uno, hasta su liberación. De cientos aún se desconoce su paradero", expresó Elda Nevares Flores, del Movimiento de Acción Revolucionaria, al dar lectura a la declaración.

Mientras tanto, Margarita Muñoz Conde, detenida durante varias semanas y torturada por Nazar Haro, según su testimonio, recordó que el ex director de la DFS ha dicho que fue siempre un "hombre institucional" y sólo cumplía órdenes. Es decir, había mandos superiores, que desde la Presidencia, la Procuraduría y la Defensa Nacional ordenaban las ejecuciones y la represión.

De quedar libre Nazar, se demostraría falta de voluntad política oficial y que todo se trató de una cortina de humo para distraer a la opinión pública, señaló.