Invoca ley para excusarse, pero ignora denuncia penal

Deja caso de divorcio la jueza Solís

JESUS ARANDA

La jueza cuarta de lo familiar, María de Jesús Jacaranda Solís Ledezma, se excusó de conocer el juicio de divorcio necesario presentado por Ana María Acosta Morales en contra del armenio naturalizado mexicano Armenak Eritsian Chujian.

La víspera de que el Consejo de la Judicatura del Distrito Federal admitiera la queja de Acosta Morales, en la que acusa a Solís Ledezma de asumir una actitud "violatoria e infame" al favorecer a su aún esposo en el juicio de divorcio, la juzgadora dio a conocer por medio del Boletín Judicial capitalino su decisión de excusarse de conocer el asunto citado.

Sin embargo, lo hizo con base en la fracción X del artículo 170, que prevé el impedimento de los jueces "si ha conocido del negocio como juez, árbitro o asesor, resolviendo algún punto que afecte a la sustancia de la cuestión, en la misma instancia o en otra".

Es decir, la jueza ignoró la denuncia penal que enfrenta en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal y la queja presentada por Acosta Morales ante el Consejo de la Judicatura.

Según la documentación que obra en el Ministerio Público y en la judicatura, Solís Ledezma habría violado las fracciones primera, sexta y séptima del artículo 170 del Código de Procedimientos Civiles del Distrito Federal, las cuales refieren que todo magistrado o juez se tendrá por forzosamente impedido para conocer de los casos: en que se trate de un negocio en el que tenga interés directo o indirecto; si ha hecho promesas o amenazas, o ha manifestado odio o afecto por alguno de los litigantes; si asiste o ha asistido a convites que especialmente para él diere o costare alguno de los litigantes después de comenzado el pleito, o si se tiene mucha familiaridad con alguno de ellos o vive con él, en su compañía en la misma casa".

Cabe recordar que en videos que dieron pie a que Ana María Acosta denunciara la presunta existencia de una relación entre la jueza y el esposo, se muestra a ambos sacando una maleta de un automóvil estacionado frente al domicilio de la juzgadora, además de más de 200 llamadas telefónicas entre los números particulares de la juzgadora y el armenio naturalizado mexicano.

Una vez admitida la demanda, el pleno del consejo asignó ayer el caso a Juan Lara Lara para que elabore el proyecto de dictamen; la parte acusadora contará con 72 horas para presentar las pruebas testimoniales y confesionales que considere necesarias para fortalecer su queja contra la juez, en tanto que ésta deberá rendir un informe justificado en su defensa.