Combate a la corrupción

Suspendió Pemex unas 60 licitaciones "amañadas"

ANDRES MORALES CORRESPONSAL

Veracruz, Ver. 4 de enero. El director de Pemex- Refinación, Juan Bueno Torio, informó que durante 2003 la contraloría interna de la paraestatal suspendió 60 licitaciones aparentemente "amañadas", para beneficiar a determinadas empresas, de un paquete de 700 concursos que se lanzaron para la realización de obras, inversiones y adquisición de servicios y productos.

Refirió que Pemex registró pérdidas por 32 mil millones de pesos, tanto por robo de combustible en ductos como por el subaprovechamiento de las refinerías, lo que obligó a mantener las importaciones de hidrocarburo, aunque la cifra negativa fue inferior a lo contabilizado en 2002.

En entrevista, el funcionario señaló que como parte del programa de transparencia en la administración pública, durante 2003 se desarrolló un trabajo puntual de vigilancia en todas las operaciones de Petróleos Mexicanos, lo que motivó a cancelar varios procesos de licitación.

Afirmó que dentro del programa de combate a la corrupción, los procesos de licitación para obras, contratación de servicios y adquisición de productos fueron los más fiscalizados.

Sin abundar sobre el nombre de las empresas designadas ni el rubro de la licitación, Bueno Torio sostuvo que de los 900 concursos lanzados por Pemex el año pasado, la contraloría interna suspendió 70 de ellos.

"En la mayoría de las 900 licitaciones que hicimos el año pasado para construir nuevas instalaciones y para la adquisición de servicios y productos, se hicieron juntas previas con los proveedores que estuvieron en regla, pero hubo como 60 que fueron rebotadas."

Mencionó que las licitaciones suspendidas estaban "amañadas" para beneficiar a determinadas compañías, pero aseguró que se pudo corregir a tiempo.

"Hubo remociones de funcionarios de buen nivel que utilizaban esas prácticas para beneficio personal, y afortunadamente ese tipo de conductas se han ido limpiando, como parte del compromiso que tomamos con el director de la dependencia, Raúl Muñoz Leos, para trabajar en ese sentido", aseguró.

Pérdidas por $32 mil millones

Por otra parte, el funcionario dijo que durante el año que acaba de concluir, la paraestatal registró pérdidas de aproximadamente 32 mil millones de pesos por el mercado negro del combustible que se roba de los ductos, así como por el subaprovechamiento de la capacidad de producción de las refinerías, lo cual obliga a que se recurra a la importación de combustibles.

No obstante, esta cifra es inferior a lo registrado en 2002, cuando se tuvieron perdidas de 37 mil millones de pesos.

Expuso que con la fuga de ganancias también se afecta el superávit primario de la paraestatal que se reporta ante la Secretaría de Hacienda, pero debido a que en 2003 se mejoró considerablemente el déficit primario, permitió liquidez para realizar nuevas inversiones con recursos propios.

Puntualizó que la importación de gasolinas bajó de 185 mil barriles a 140 mil barriles diarios en 2003, que representan 45 mil barriles menos que se dejan de importar de Estados Unidos.