Podría ganarse una medalla en 20 kilómetros, vaticinó Carlos Mercenario

La marcha tiene expectativas con Noé, Bernardo Segura y Alejandro López

Debemos trabajar en las bases para producir cincuenteros, porque hay un déficit, indicó

ROSALIA A. VILLANUEVA

Comprometido con su disciplina por ser uno de los medallistas olímpicos que ha producido la caminata de México, Carlos Mercenario mantiene vivas las esperanzas de que en Atenas 2004 se obtenga una presea en la prueba de 20 kilómetros, pero todo dependerá del resultado que se logre en el selectivo de Tijuana con Noé Hernández, Bernardo Segura y Alejandro López en la Copa del Mundo en París.

Para el medallista de plata en Barcelona 92 no hay duda de que estos tres exponentes son los mejores representantes del país en esa prueba, además de que sus marcas los avalan al estar entre la elite mundial, principalmente Noé, quien este año terminó cuarto en el Mundial de Atletismo de París, luego de estar inactivo por lesiones.

Los andarines comenzaron su preparación hace una semana con campamentos en el estado de México, algunos en el Nevado de Toluca, otros en el Centro Ceremonial Otomí y en Ixtapan de la Sal, informó Mercenario, quien apuntó que cada grupo fue apoyado por la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y CIMA (Compromiso Integral de México con sus Atletas).

El responsable de la comisión técnica de marcha no ocultó su desánimo sobre la situación que priva en la prueba de 50 kilómetros, donde hace algunos años él fue el mejor exponente.

"Tenemos un problema allí y es inevitable; se necesita trabajar más en las bases para producir cincuenteros'', pues los únicos que se mantienen ya rebasan los 30 años de edad, como es el caso de Germán Sánchez y el reaparecido Ignacio Zamudio.

El subcampeón olímpico de Sydney 2000, Noé Hernández, está seguro de obtener la clasificación: "Actualmente tengo medio boleto, necesito trabajar para completar ese pase y estar en la batalla'', manifestó el mexiquense, quien cerrará el año concentrado en Ixtapan de la Sal al lado de su entrenador Miguel Angel Sánchez.

"Creo que estoy en mi mejor momento y disfruto el entrenamiento. En Sydney todo fue muy rápido, no lo esperaba y ahora estoy asimilando todo: el trabajo, el esfuerzo, encaminado a seguir en la línea olímpica, porque estoy viviendo el camino directo a la meta'', puntualizó el andarín, quien el próximo año competirá en Portugal, Italia y Alemania, y hará un campamento en Bolivia.