"šSe nos está cayendo la iglesia!", grito colectivo en La Asunción

Las campanas de la capilla de La Asunción repicaron al paso del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, no por accidente -pues el reloj marcaba las 11:10 de la mañana-: se debía a que un grupo de mujeres quería llamar su atención y desde la puerta gritaba con insistencia:

-šSeñor López Obrador, se nos está cayendo nuestra iglesia! šLa cúpula está fracturada!

Era demasiada la gente que intentaba atraer su atención para exponerle algún problema personal, pedirle "una tarjeta" o simplemente saludarlo de mano. Si bien se detuvo frente al templo un instante, cuando muchos pensaron que entraría se siguió de largo hasta el final de la calle, donde se encuentra la ermita de La Asunción, entre el repique del campanario y el tronido de cohetes lanzados al aire.

No faltó quien gritara: "šAndrés Manuel para presidente!", lo que hizo parecer el momento un acto de campaña. Y es que, fuera de agenda, el jefe de Gobierno aceptó la invitación de vecinos del barrio de La Asunción y autoridades de la delegación para visitar la ermita a la que debe el nombre el lugar, construida en el siglo XVIII y restaurada con apoyo de la demarcación, después de haber permanecido cerrada siete años.

La caminata por las calles del barrio se realizó después de que el jefe de Gobierno y el delegado de Iztacalco, Armando Quintero, inauguraron el Centro Cultural y Cibernético José Martí, que se encuentra a un costado de la plaza Miguel Hidalgo. ANGEL BOLAÑOS Y JOSEFINA QUINTERO