El número de pobres y hambrientos aumentó en Nueva York 26% en un año: sondeo

Festivo, patriótico y semirreligioso, el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos

La ayuda de etnias a los puritanos ingleses fue pagada tiempo después con el exterminio

DAVID BROOKS CORRESPONSAL

Nueva York, 27 de noviembre. Hoy es el día festivo, patriótico y semirreligioso cuando los estadunidenses dan gracias por todo lo que tienen y en familia, con una gran cena se marca a la vez el primer año de sobrevivencia de los primeros colonos -los peregrinos puritanos ingleses- en este país.

Pocos saben por qué el menú tradicional incluye pavo, pan de elote, camote y calabaza. Todos son ingredientes del alimento indígena de esta región de Norteamérica que se convertiría posteriormente en Estados Unidos, y fue gracias a estas etnias que los colonos sobrevivieron esos primeros años.

Les enseñaron cómo y de qué vivir en estas tierras. En los siguientes dos siglos a los indígenas se les pagó con genocidio, expulsión de sus tierras y, finalmente, la destrucción casi total de su cultura.

Howard Zinn, el historiador estadunidense, recuerda que cuando se estableció la primera colonia permanente de ingleses, Ja-mestown, Virginia, y en Massachusetts a principios del siglo XVII, no fue en tierras deshabitadas sino en territorio indígena.

En 1610 los de Virginia sufrieron su peor hambruna y casi desaparecen. Sobrevivieron por lo que les enseñaron los indígenas. Pero como cuenta Zinn, de lo que se calcula como una población total de 10 millones en las tierras al norte de México al llegar Cristóbal Colón, sólo quedaría menos de un millón.

En el noreste se establecía una de las tribus más poderosas, la Liga de los Iroqueses. En sus comunidades, cuenta Zinn, la tierra era de propiedad compartida y se trabajaba en común, las mujeres tenían un trato igualitario con los hombres, se enseñaba historia y el valor de la solidaridad, así como la importancia de la independencia y no sumisión.

El historiador Gary Nash, citado por Zinn, narra de esta vida indígena: "Antes de la llegada de los europeos, en los bosques del noreste no había leyes ni ordenanzas, comisarios ni policías, jueces ni jurados, juzgados ni prisiones, nada de la parafernalia autoritaria de las sociedades europeas. Sin embargo, estaban firmemente establecidos los límites del comportamiento aceptable".

O sea, según Zinn, todo lo "contrario de los valores que importaron los primeros colonos, una sociedad de ricos y pobres, controlada por los sacerdotes, por los gobernadores, por las cabezas -masculinas- de familia".

El lideresa indígena Powhatan dirigió un mensaje al dirigente de los colonos en Virginia, John Smith: "He visto morir a dos generaciones de mi gente (...) Conozco la diferencia entre la paz y la guerra mejor que ningún otro hombre de mi país. ƑPor qué toman ustedes por la fuerza lo que pudieran obtener por vía pacifica? ƑPor qué quieren destruir a los que les abastecen de alimentos? ƑQué pueden ganar por la guerra? ƑPor qué nos tienen envidia? Estamos desarmados y dispuestos a darles lo que piden si vienen en son de amistad. No somos tan inocentes como para ignorar que es mucho mejor comer buena carne, dormir tranquilamente, vivir en paz con nuestras esposas y nuestros hijos, reírnos y ser amables con los ingleses (...) que huir de ellos y malvivir en los fríos bosques".

Pero hoy es Día de Acción de Gracias, y todo eso es historia. Este jueves el presidente George W. Bush apareció sorpresivamente en Bagdad para afirmar ante sus tropas que Estados Unidos se mantendrá firme en su misión de llevar la "libertad" a esa tierra.

Hoy todos cenan y ven los tradicionales partidos de futbol americano. Hoy se celebra la sobrevivencia de los colonos que poco después de conquistar los pueblos indígenas es-tablecerían un sistema de esclavitud de africanos para hacer florecer la "nueva" tierra.

Hoy, en el medio tiempo del partido entre los Cowboys de Dallas y los Delfines de Miami, hubo un concierto para elogiar a las fuerzas armadas, con una canción de country-rock celebrando la guerra como un contragolpe a lo sucedido el 11 de septiembre de 2001, para "que todos aquí gocemos de la libertad y la alegría", con una enorme bandera, imágenes de los soldados en Irak y las porristas bailando.

Hoy, mientras todos cenan con el tradicional menú indígena, los pocos indios del país son uno de los sectores más pobres de Estados Unidos, y algunas reservaciones registran astronómicos niveles de desempleo, al-coholismo y suicidio.

Hoy, mientras todos cenan dando gracias a la "libertad", la FBI tiene la misión de vigilar a opositores de la política bélica de este gobierno, hay cientos de prisioneros de guerra a los que se les niega derechos de la ley internacional en Guantánamo y nuevas leyes que permiten que cualquier ciudadano sea privado de su libertad sin goce de sus derechos constitucionales con la justificación de poderes ejecutivos en tiempos de guerra.

Hoy, en las calles de Nueva York, las organizaciones de caridad que se dedican a alimentar a los pobres informan que no tienen suficiente alimento para todos los que lo piden, 26 por ciento más que hace un año según un nuevo sondeo de la Coalición contra el Hambre.

Como parte de la tradición, el viernes después del jueves que se celebra el Thanksgiving es considerado como el día de compras más activo del año (arranca así oficialmente la temporada comercial conocida como Na-vidad). Como los políticos han anunciado, después del 11 de septiembre del 2001, que el shopping es actividad patriótica, no sorprende que a las empresas y comercios también se les ofrezca su propio día de gracias.

Tal vez lo único que rompió la tradición este año fue el anuncio de que en el tradicional del Día de Acción de Gracias patrocinado por Macy's en Nueva York y televisado nacionalmente, quien aparecería como Señora Santa Clos sería hombre, el gran actor de Broadway y del cine Harvey Fierstein.

En parte como un desafío a políticos y con-servadores que buscan prohibir el matrimonio gay y limitar derechos civiles a las parejas homosexuales, anunció que participaría como la mitad de una pareja del mismo sexo.

En un artículo publicado por el New York Times ayer, Fierstein recuerda a los grandes iconos estadunidenses gay: Walt Whitman, James Baldwin, Aaron Copland. En un día que en parte es festejo patriótico, revela que la autora de la canción America the beautiful (canción patriótica popular) fue lesbiana.

También señala que el reverendo Mychal Judge, capellán del Departamento de Bomberos que pereció en las torres el 11 de septiembre y que ha sido elogiado por todo político como un gran héroe, también era abiertamente homosexual.

"Al aproximarnos a los días festivos me gustaría imaginar que el temor y la intolerancia no prevalecerán en estas tierras. Tal vez en estos días festivos podremos aventar fuera parte de esta intolerancia que radica en nuestros corazones y abrir espacio para más amor y aceptación", escribió. "Recuerden -agrega- saludarme en mi carro alegórico. Yo seré el hombre en el gran vestido rojo".

Pero cuando en Macy's, propiedad de una gran empresa nacional de megatiendas de-partamentales, se leyó el artículo, comenzó un gran debate sobre la tradición del desfile y la defensa de su imagen familiar.

Al parecer, Macy's dijo "no gracias" y la pareja Clos fue de un hombre y una mujer. La otra señora Clos fue relegada a un carro alegórico separado. Salvaron el Día de Acción de Gracias. De nada.