Un acuerdo en la materia no puede depender de la voluntad de EU: Santibáñez

Apremian a Fox a que asuma una defensa más agresiva de migrantes

El presidente de El Colegio de la Frontera Norte advierte que no puede seguir la pasividad

Recomienda que se exija respeto a derechos de connacionales que laboran en el país del norte

VICTOR BALLINAS ENVIADO

Puerto Vallarta, Jal., 13 de noviembre. El presidente de El Colegio de la Frontera Norte, Jorge Santibáñez Romellón, manifestó ayer que la respuesta al problema de la migración -el segundo conflicto nacional más importante después de la pobreza- no puede depender de la voluntad de Estados Unidos, pues "sería tanto como aceptar que no somos soberanos". Por ello, apremió al presidente Vicente Fox a emprender acciones agresivas de protección a los trabajadores mexicanos en aquel país.

Esto, subrayó, "desde luego que no le va a gustar a Estados Unidos. Ese país no verá bien que el gobierno mexicano proteja y oriente a sus migrantes, que exija que se respeten sus derechos laborales y sociales -educación, salud y bienestar-, pues podría argumentar que México propicia la emigración con esas acciones ".

El gobierno mexicano, insistió el experto, "está obligado a emprender esos programas porque esa es la obligación fundamental de cualquier gobierno democrático, le guste o no a Estados Unidos".

Al participar en el segundo día de los trabajos del Encuentro Nacional entre la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CND), comisiones estatales y organismos no gubernamentales (ONG), el investigador insistió en que ya pasó el momento de llegar en el futuro próximo a un acuerdo migratorio entre los dos gobiernos. "Ya no tenemos que seguir apostando a eso, pues no lograrlo puede convertirse en un grave riesgo y en un factor contrario al presidente Vicente Fox en las elecciones de 2006", advirtió.

Por ello, recomendó que el Ejecutivo ponga en marcha programas de protección de migrantes -defender sus derechos laborales y humanos en México y en Estados Unidos- y de orientación (amplias campañas informativas sobre los riesgos que van a enfrentar si cruzan por las montañas o el desierto).

El especialista, quien ofreció una conferencia magistral sobre el tema, urgió a que el gobierno mexicano "obligue al estadunidense a sentarse a negociar la regulación y el ordenamiento de la migración, y eso sólo lo va a lograr si Fox emprende acciones agresivas en defensa de los mexicanos en aquel país. Esa será la única forma de sentar a Estados Unidos a discutir un acuerdo migratorio".

Santibáñez Romellón destacó que "el Presidente no puede concluir su administración diciéndole a los mexicanos: 'nos la pasamos pidiendo el acuerdo, pero no nos dieron nada', y dejar el proceso igual".

Consideró que es necesario llamar la atención sobre la oportunidad política "de que no todo puede descansar en la voluntad de Estados Unidos, pero tampoco el gobierno mexicano puede permanecer más tiempo pasivo, pues ese país tiene años dándole largas a los gobiernos mexicanos sobre un acuerdo migratorio".

El presidente de El Colegio de la Frontera Norte manifestó que México "debe decir las cosas muy fuerte, y para ello es necesario que emprenda agresivos programas de defensa de los migrantes, sólo así podrá lograr que Estados Unidos acepte discutir cómo ordenar y regular el fenómeno migratorio, pues no hay otra forma. A los empleadores estadunidenses no les interesa tener trabajadores mexicanos documentados con derechos, pues hoy carecen de garantías y se pueden deshacer de ellos en cualquier momento".

También dijo que en México tratan muy mal a los trabajadores que viajan al norte: "las aerolíneas, Aeroméxico y todas las demás, obligan a los migrantes a comprar boletos en primera clase, pues les dicen que no los hay en clase turista; les cobran por sobrequipaje y actúan como una especie de polleros legalizados, pues todo mundo sabe que de los aeropuertos como el de Hermosillo salen camionetas que llevan a los migrantes a la franja fronteriza.

"En ese caso -abundó- lo que ocurre es que el gobierno se hace de la vista gorda, debe regular esa situación, deben existir módulos en los aeropuertos para que los migrantes se quejen, y se les debe atender."

El especialista destacó que este problema no es casual ni coyuntural, y mucho menos aislado, sino que adquirió "una dimensión preocupante y sistémica". Planteó que la política migratoria de Estados Unidos permite y propicia esas violaciones, mientras del lado mexicano la ausencia de una política en la materia incrementa la vulnerabilidad.

Xóchitl Gálvez, por una nueva reforma indígena

En tanto, Xóchitl Gálvez, directora de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, dijo ayer a las organizaciones no gubernamentales y a los organismos públicos de derechos humanos que está de acuerdo y coincide con quienes sostienen que deben realizarse más cambios en materia indígena, para que la libre autodeterminación y la autonomía se reconozcan en la Constitución.

Ante la andanada de críticas que la víspera las ONG hicieron al presidente Vicente Fox, en tono conciliador, la funcionaria reconoció que los recientes cambios constitucionales en materia indígena son insuficientes. Por ejemplo, señaló, se debe legislar sobre la propiedad de los recursos naturales que se ubican en las regiones indias; también debe analizarse y revisarse el concepto de pueblo y el tema de la asociación territorial entre comunidades.

Sin embargo, dejó en claro que hay que debatir sobre cómo dar el siguiente paso para propiciar una nueva reforma mediante la cual se pongan por escrito las insuficiencias, dialogar con el Ejecutivo y trabajar sobre el tema, "pero debemos tener claro que estos no son los mejores tiempos políticos para ello".

Al ofrecer en el encuentro una conferencia magistral sobre el tema, Gálvez planteó a las ONG que en la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas "vamos a duplicar el presupuesto de 10 a 20 millones de pesos para apoyarlas, porque creemos que hacen un trabajo mejor que el nuestro y necesitamos que laboren con nosotros en temas como la excarcelación de presos indígenas, el registro civil, porque hay muchas personas que carecen de actas de nacimiento.

"Vamos a trabajar, pero queremos cuentas claras, porque hay ONG de todo tipo. Hay organizaciones que piden apoyo y presentan proyectos viejos, de hace dos años. Eso no se vale, hay que ser honestos de ambos lados y trabajar con la verdad."

En ese tenor, agregó: "yo no compro ese cuento de que porque ustedes reciben dinero de nosotros ya somos socios. Eso no es cierto, ustedes pueden seguir siendo tan críticos porque finalmente ese dinero es del pueblo, no lo sacamos de nuestra bolsa ni yo pretendo atrapar organizaciones para que no me madreen, ni modo, cuando haga pendejadas".

Esto arrancó aplausos de integrantes de las ONG. Enseguida, Gálvez subrayó: "a los funcionarios más nos vale que estemos conscientes de eso, de que no siempre hacemos bien las cosas. La crítica propositiva fortalece, la destructiva no ayuda a nadie".