México D.F. Miércoles 29 de octubre de 2003
Los acuíferos que las abastecen estarían comunicados con valle de forrajes
En entredicho, seguridad de especies milenarias en Coahuila
FERNANDO LOPEZ PEREZ CORRESPONSAL
Torreon, Coah., 28 de octubre. De comprobarse que los pozos que abastecen de agua al valle El Hundido se comunican y alimentan el área natural protegida de Cuatro Ciénegas -lo que pondría en riesgo las especies endémicas similares a las que habitaron la tierra hace millones de años-, el gobierno del estado cerraría las casi 2 mil hectáreas de cultivo de forrajes de aquella localidad, advirtió el secretario estatal de Fomento Agropecuario, Enrique Salinas Aguilera.
Al comparecer ante el Congreso local, el funcionario dijo que "si nuevos estudios llegaran a demostrar que están comunicados los acuíferos, tendría que pensarse seriamente en buscar otra opción para el cultivo de forrajes" que sirven de alimento al ganado del Grupo Lala, principal productor de leche en México, pues ello pondría en riesgo el ecosistema donde viven especies únicas del universo.
No obstante, dijo que para garantizar la factibilidad de la explotación del acuífero del valle El Hundido, el gobierno de Enrique Martínez ordenó un estudio a una compañía especializada, y la conclusión fue que se trata de acuíferos distintos. "Los valles no están comunicados, son aguas diferentes en cuanto a su salinidad", dijo.
No obstante, agregó que un estudio realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México indica que el ADN de las bacterias del acuífero del valle El Hundido es igual al de las del valle de Cuatro Ciénegas, lo que implica que los acuíferos podrían estar comunicados.
El documento no es concluyente, ya que recomienda hacer otros estudios porque el ADN de esas bacterias podría estar también en otros acuíferos de la entidad, pues hace millones de años todo el territorio de la entidad actual habría estado cubierto por aguas del mar.
Otro estudio elaborado por italianos asegura que el agua procede de la sierra de San Marcos, cercana a la poza La Becerra, y que se trata de una cuenca cerrada, pero "si nuevos estudios llegaran a demostrar que los acuíferos están comunicados, tendría que pensarse en buscar otra opción para cultivar forrajes que sirvan de alimento al ganado lechero", enfatizó Salinas Aguilera.
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