Diputados priístas exigen a Gordillo informe de la negociación y lista de aspirantes

Estancado, el proceso legislativo para elegir el Consejo General del IFE

La coordinadora del tricolor pidió plazo de 24 horas para encontrar candidato a presidente

ENRIQUE MENDEZ, ROBERTO GARDUÑO Y MIREYA CUELLAR

El proceso entre los legisladores de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) para conformar una planilla consensuada de candidatos a integrar el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE), se estancó ayer en la Cámara de Diputados porque la bancada priísta exigió a su coordinadora, Elba Esther Gordillo Morales, un informe detallado de las negociaciones y de la lista de los aspirantes que impulsará el tricolor.

Esto propició que Gordillo Morales solicitara al coordinador adjunto de la bancada del PAN, Germán Martínez, un plazo de 24 horas para encontrar a un candidato para la presidencia del Consejo General del IFE, luego de que el PRI fracasó en su intento de llevar a ese cargo al ex procurador salinista Diego Valadés, cuando a última hora lo vetó la bancada del PRD, y él mismo declinó aspirar a ese puesto.

Además, pesa en contra del director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México ser considerado uno de los principales opositores al voto de los mexicanos que radican en el extranjero.

La búsqueda de acuerdos entre los grupos parlamentarios avanzó el pasado fin de semana. Todo indicaba que este martes habría nuevo Consejo General; sin embargo, la negociación tropezó.

El grupo encargado de redactar el paquete de reformas al IFE elaboró, inclusive, una propuesta para reducir el financiamiento público a los partidos políticos; la reducción temporal de las campañas políticas; adelgazar el número de personal administrativo; regular precampañas; establecer las atribuciones del instituto para organizar los procesos de competencia interna en los partidos; acceso al secreto bancario del IFE; aumento del umbral de adherentes para obtener registro, y recuperación de los recursos económicos de aquellos partidos que pierdan el registro.

También se programó una reunión entre los coordinadores parlamentarios, que tendría lugar el lunes 27 de octubre en el Palacio Legislativo de San Lázaro. El único que se presentó fue el perredista Pablo Gómez. El panista Germán Martínez sólo acudió a la oficina de la cita para dejar constancia de registro, y no llegaron Elba Esther Gordillo ni Miguel Angel Yunes. Este jueves es el último día para que los diputados se pongan de acuerdo porque, por ley, el próximo viernes deberá instalarse el nuevo Consejo General del IFE.

El actual consejo fue electo para trabajar durante siete años, que se cumplen precisamente el próximo viernes. El consejero presidente, José Woldenberg, ya dijo que si los partidos no se ponen de acuerdo se quedarán a cargo del IFE el secretario ejecutivo y los directores de área, porque quienes llegaron en 1996 como consejeros ya se van.

Por su parte, el PRD fijó desde el jueves pasado una posición clara respecto de los candidatos que impulsa al Consejo General del IFE. Plantea que Jesús Cantú y Clara Jusidman sean parte del instituto.

En horas recientes un acercamiento entre el PRD y el Partido del Trabajo (PT) abrió la puerta de la relección a Jaime Cárdenas, carta del propio PT. Pero no está claro que este partido tenga derecho a voto en la negociación, además de que Cárdenas podría ser vetado por el PAN.

Hasta ahora se mencionan con fuerza cuatro nombres como aspirantes a presidir el IFE: Alfonso Zárate, asesor político e incondicional de Elba Esther Gordillo; Fernando Zertuche, secretario ejecutivo del IFE; Luis Carlos Ugalde, investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica, y Ulises Schmill, ex ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Además, los panistas ven con beneplácito a Arturo Sánchez, Rodrigo Morales y la yucateca Patricia McCarthy. Sánchez, quien fue la sombra de Juan Molinar en el IFE, es uno de los tres directores ejecutivos del IFE que cabildean con los partidos políticos en busca de un lugar en el Consejo General. Los otros son María del Carmen Alanís, encargada del área de capacitación, y Jaime Rivera Velázquez, director ejecutivo de organización electoral.

Sin reglas claras -Jaime Rivera dice que sólo las conocen los coordinadores parlamentarios y los presidentes de los partidos-, la elección de los consejeros electorales se ha convertido en un juego de ajedrez donde todos los aspirantes están en calidad de peones, piezas factibles de ser movidas por los líderes de las fuerzas políticas. En esta partida no hay reyes ni reinas, porque los candidatos que un día parecen avanzar al otro día están en jaque y terminan, como Valadés, fuera del tablero.

La negociación se ha entrampado también porque los partidos juegan varias partidas a la vez. En un tablero se disputa el Consejo General del IFE, en otro las reformas "estructurales" y en uno más el presupuesto. En el IFE se dice que el PAN no tiene candidato a la presidencia del Consejo General, porque ésa es una de sus ofrendas para "pavimentar" el camino de la reforma eléctrica. Está claro que el próximo presidente del IFE será propuesto por el PRI, porque ahí los otros partidos sólo tienen veto y no voto.

En tanto, el presidente Vicente Fox envió ayer una carta al consejero presidente (saliente), José Woldenberg, para expresarle su reconocimiento "a la transparencia, eficacia y convicción democrática con que fueron conducidas" las actividades del IFE.