México D.F. Martes 28 de octubre de 2003
Aun con la oposición del PAN, el nombre de la universidad quedará inscrito en oro
Sesión solemne hoy en San Lázaro en honor de la UNAM
ENRIQUE MENDEZ
La Cámara de Diputados llevará a cabo este martes una sesión solemne para inscribir en el muro de honor del salón de sesiones el nombre de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con letras de oro.
A la ceremonia están invitados el rector Juan Ramón de la Fuente y diputados que formaron parte de la anterior legislatura, en la que se aprobó el dictamen respectivo, a pesar de la oposición del Partido Acción Nacional, así como directores de facultades y maestros eméritos de la máxima casa de estudios del país.
El reconocimiento a la universidad, dijo ayer el presidente de la Comisión de Reglamentos y Prácticas Parlamentarias de la cámara, Iván García Solís, se da en momentos en que la institución no cuenta con recursos suficientes para cumplir con su labor educativa y por ello es necesario que también se refleje en el presupuesto de egresos de 2004.
Señaló que el esfuerzo educativo de la UNAM, así como el de otras instituciones de educación pública, debe ser respaldado porque es una de las prioridades nacionales, y de la cual depende la viabilidad de México como país soberano.
El legislador perredista afirmó que a ello deberían subordinarse no sólo los excesivos salarios y prestaciones de los funcionarios del gobierno federal, sino también la "compulsión" del presidente Vicente Fox por adelantar, sin beneficio en los intereses, los pagos de la deuda externa, cuyo capital ya ha sido pagado dos veces. "La deuda educativa que el poder público tiene con el pueblo es mucho más urgente", sentenció.
Con el reconocimiento a la UNAM, comentó García Solís, también se corresponde a la contribución que ha hecho a los valores cívicos que se han implantado de manera decisiva en la sociedad mexicana, pero resaltó que está pendiente reconocer el aporte que a la vida democrática del país hicieron los estudiantes y profesores que participaron en el movimiento de 1968.
"De ese movimiento, que el país ha hecho suyo, todavía se espera una mención en el muro de honor a los manifestantes caídos el 2 de octubre, como elemental reconocimiento que todavía le niegan la mezquindad de algunas fuerzas políticas", sostuvo.
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