México D.F. Sábado 25 de octubre de 2003
Theater Titanick escenificó Insect
en la zona al aire libre Los Pastitos
Miles de personas vieron el nacimiento de una princesa
hormiga con alas
Después de la destrucción y el miedo,
sólo subsiste el anhelo de volar
CARLOS PAUL ENVIADO
Guanajuato, Gto., 24 de octubre. Una visión
espectacular, divertida y delirante. Un sueño, un deseo agigantado.
Una fábula que narra la vida laboriosa de las hormigas y su inesperado
y ferviente anhelo de volar, es lo que la compañía alemana
Theater Titanick ofreció la noche del jueves en el espacio a cielo
abierto Los Pastitos, en el contexto de la versión 31 del Festival
Internacional Cervantino (FIC).
Sin necesidad de una lupa, de un microscopio, los más
de 4 mil espectadores, muchos de ellos sentados en las laderas de una loma,
fueron transportados al universo de esos queridos y bellos insectos, de
cómo su reina roja, una simbiosis de carne y acero de proporciones
gigantescas, dio a luz a una princesa totalmente diferente a todas las
demás; una hormiga con alas.
La soberana barroca y autoritaria es cuidada y venerada
por un pequeño ejército de obreros-hormiga, soldados, constructores,
maestros y científicos. Su monumental y metálico abdomen
es fuente de la vida, también enorme trono, símbolo de su
poder.
La vida cotidiana en este mundo es colorida. Cada una
de las hormigas, del tamaño de un ser humano, realizan su trabajo,
transportan los huevos que produce su reina, de su vientre a una enorme,
compleja e inefable máquina incubadora. Caminan, corren, festejan
cada nacimiento con fuegos artificiales.
Después de la tempestad viene la calma
Con
música original en vivo interpretada por Gundolf Nandico, todo en
este montaje es monumental, salvaje, poético, que cuenta con estructuras
metálicas que pesan entre ocho y 10 toneladas, además de
una grúa hidráulica con un brazo de extensión de 50
metros de altura.
Los actores, quienes también son los técnicos
de este espectáculo titulado Insect, asombran a los espectadores,
pues de repente algo sucede; rayos y truenos estremecen la vida laboriosa
del hormiguero. Una esfera metálica a más de 20 metros de
altura aparece en el firmamento. Del cielo caen enormes gotas. Bastaría
decir que una sola de ellas podría empapar a más de dos personas
para dar idea de su magnitud. La lluvia es intensa. La destrucción
y el miedo se apodera de los desconcertados insectos. Luego de la tormenta
viene la calma. El nacimiento de la tierna y feliz hormiga con alas, a
quien sus demás hermanas miran con desconcierto, así como
su reina la ve con envidia por lo que manda le corten las alas, sea expulsada
del reino, al tiempo que ordena también a sus súbditos construir
unas alas para su beneficio.
Una serie de divertidos, pero frustrados intentos se suceden.
Alas de diferentes tipos y formas son presentadas ante la reina. Desde
unas con hojas de árboles, hasta cohetes y bicimotos con alas de
metal.
Por último, construyen una compleja, monumental
y rechinante hormiga de acero, a la que es ensamblada la reina,
pero en la primera prueba de vuelo explota de manera espectacular.
Todo el armatoste se incendia, la reina arde, agoniza
horrorizada, mientras que del cielo aparece la joven hormiga exiliada,
montada en un pequeño y ligero helicóptero, a quien le cortaron
las alas, no así el anhelo de volar.
Theater Titanick se presenta este sábado y el domingo
a las 22 horas en el espacio a cielo abierto Los Pastitos.
|