Empresarios entre ellos, denuncia Romero Oropeza al comparecer ante la ALDF

Vivales usufructúan patrimonio público

Enfrenta el oficial mayor del gobierno capitalino fuertes críticas de diputados de oposición

RAUL LLANOS SAMANIEGO

En su primera comparecencia ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), el oficial mayor del gobierno capitalino, Octavio Romero Oropeza, denunció la acción de un "grupo de vivales", entre ellos algunos empresarios, que "por todos los medios, incluyendo argucias legales, han buscado hacer dinero fácil a costa del patrimonio público".

Es, dijo, gente que explota o estuvo usufructuando "indebidamente" inmuebles propiedad del Gobierno del Distrito Federal (GDF). "Unos favorecidos por los negocios que al amparo del poder público realizaron funcionarios corruptos de regencias extintas; otros amparados en documentos falsos, y algunos más interponiendo y manipulando juicios de toda índole."

Citó como casos concretos el predio Paraje San Juan, en Iztapalapa, por el cual una juez ordenó indemnizar con mil 810 millones de pesos; el terreno donde se encuentra la Escuela Nacional de Antropología e Historia, por el que se reclaman 176 millones de pesos, así como particulares que reclaman concesiones de explotación de materiales pétreos que se les habrían otorgado desde la regencia de Carlos Hank González. Dijo que para hacer frente a esta situación se ha puesto en marcha una estrategia jurídica para defender al máximo los intereses de la ciudad y sus habitantes.

-ƑA qué vivales se refirió? -se le preguntó al final de su comparecencia.

-Los vivales son algunos empresarios que se han pasado de la raya, que han actuado en contra del gobierno, (coludidos) con funcionarios del gobierno; vivales de ambos lados.

No obstante, declinó precisar los nombres de los personajes a los que se refería.

Durante su exposición en tribuna, Octavio Romero enfrentó fuertes críticas de la oposición: el pevemista José Antonio Arévalo le cuestionó la profesionalización de los servidores públicos del GDF; Mauricio López, del PRI, lo increpó sobre la carencia de una reforma administrativa eficaz y la falta de cumplimiento de la promesa de basificación; los panistas Mónica Serrano y Obdulio Avila -a quien evidenció por tener lista su réplica antes de conocer las respuestas a sus preguntas- criticaron la "permanente corrupción" en el aparato de gobierno.

Por su parte, Emilio Fernández Allende y Gerardo Villanueva, del PRD, destacaron las acciones emprendidas por la administración local, que llevaron a acabar con las anomalías que había en la entrega de prestaciones a los trabajadores del GDF, los ahorros obtenidos con las medidas de austeridad y el hecho de terminar con los altos sueldos de los funcionarios y las restricciones salariales para los miembros del sindicato del GDF.

Antes Romero Oropeza había detallado que en el gobierno local existe una planta laboral de 308 mil trabajadores, quienes anualmente implican pagos salariales por 35 mil 600 millones de pesos, y que incluso cada punto de incremento porcentual a sus sueldos exige erogaciones por 300 millones.

Entrevistado al final de su comparecencia con relación al comentario del líder de los burócratas, José Medel -quien por cierto estuvo ausente en esta parte de la sesión-, de que echará atrás la firma de las condiciones generales de trabajo, expresó que es un asunto que "se tendría que trabajar, pero en su momento, en un ambiente donde las aguas no estén tan turbias".