México D.F. Martes 21 de octubre de 2003
Primera jornada del foro académico que se desarrolla en el Museo de Antropología
Debate de ideas para evaluar labor de Matos Moctezuma
MONICA MATEOS-VEGA
Hace mucho que el reconocimiento a la trayectoria de un investigador vivo no reunía a tantos y tan destacados especialistas en antropología e historia, como sucedió ayer en el comienzo de las Jornadas Académicas en Homenaje a Eduardo Matos Moctezuma.
Colegas, discípulos y amigos del artífice del Proyecto Templo Mayor se dieron cita en el Museo Nacional de Antropología para aplaudir los logros del arqueólogo. La mejor manera de reconocer la labor de más de cuatro décadas de Matos fue con el debate de ideas.
Bajo esta premisa, durante toda la semana se realizarán mesas redondas y conferencias en torno de las investigaciones actuales referentes a los mexicas, en las que participarán Miguel León-Portilla, Alfredo López Austin, Rubén Cabrera, Saburo Sugiyama, Leonardo López Luján, Jeffrey R. Parsons, William Sanders y Esther Pasztory, entre otros investigadores convocados por la Universidad Harvard, El Colegio Nacional y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Entre las investigaciones del homena-jeado, mencionó el libro Muerte al filo de obsidiana (1975), en el cual ''se fincan las tres grandes obsesiones en torno de las cuales Matos ha escrito su vastísima obra, que hoy suma 400 fichas bibliohemerográficas: el tema de la muerte en el México prehispánico, el de la cultura mexica y el de la historia de la arqueología".
Profundo conocedor de Mesoamérica
En su ponencia, Sergio Raúl Arroyo, director del IBAH, explicó que Matos empezó a estudiar arqueología en 1959; un año después, obtuvo la plaza de practicante en ciencias historicogeográficas en la Dirección de Monumentos Prehispánicos.
En esa época, ''se asomó por primera vez a las cinco grandes ciudades prehispánicas del centro mesoamericano: Teotihuacán, Tlatelolco, Tenochtitlán, Tula y Cholula, que, en conjunto, se volvieron su territorio y su circunstancia: ahí se decidió por la arqueología urbana, particularmente en el estudio del nexo fundamental de la urbe y el funcionamiento de los templos principales como nodos simbólicos y centros socioeconómicos".
En la primera jornada del encuentro académico también participó David Carrasco, doctor en historia de las religiones por la Universidad de Chicago, quien resumió e interpretó el novedoso impacto de Matos Moctezuma y su obra sobre las formas en que los museos, las instituciones educativas y el público en Estados Unidos perciben, entienden y disfrutan de las imágenes, la arqueología y la narrativa aztecas.
En su turno, la historiadora Beatriz de la Fuente detalló que Matos Moctezuma es un ''ejemplo singular de los muchos e insignes personajes que desde hace más de dos siglos se han preocupado por conocer el pasado del México prehispánico y de ahondar en él de manera pausada y reflexiva''.
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