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México D.F. Jueves 16 de octubre de 2003
Ofrece un acercamiento diferente a las festividades
del Día de Muertos
La muerte a secas, tema de una colectiva en una galería
de Tepito
La exposición captará nuevos públicos,
pronostica el director de la galería
MERRY MAC MASTERS
La muerte a secas, sin ''folclorismos rituales del buen
morir" o ''alegres homenajes", más bien el fin violento y doloroso
de la vida, es la propuesta de la próxima exposición de la
galería José María Velasco, enclavada desde hace 52
años en el populoso barrio de Tepito.
Integrada
por la obra de 17 artistas, desde los de trayectoria conocida como Arturo
Rivera, Reynaldo Velázquez, Martha Pacheco y Teresa Margoles, hasta
los que tienen pocos años en el quehacer artístico, la colectiva
Muerte será inaugurada el domingo 19 a las 12 horas en el
local de Peralvillo 55, colonia Morelos, que para entonces habrá
sido renovado.
Tema tatuado en el alma
Hace un año, cuando Carlos Jaurena, director de
la galería, invitó a Patricia Marcos a curar la muestra,
le recomendó que evitara la obra de artistas que en su trabajo hicieran
referencia directa a las festividades del Día de Muertos, y que
seleccionara la obra con base en la calidad tanto de factura, estilo y
concepto.
De acuerdo con la curadora independiente, la muerte es
un tema que en lo cultural los mexicanos ''llevamos tatuado en el alma",
aunque se suele ir por el lado de la muerte festiva. Después, Marcos
empezó la búsqueda de pintores, escultores y fotógrafos
para quienes el tema fuera ''cotidiano" y que hubiera en su obra ''un registro
obsesivo de una realidad dolorosa, es decir, la muerte".
En esa tarea colaboró Teófilo Cohen. La
pluralidad de lenguajes estéticos se complementa con música
compuesta por un grupo de jóvenes.
Hubo
quienes crearon una pieza ex profeso para la exposición,
como Ana Fuentes, quien eligió el tema de las mujeres asesinadas
en Ciudad Juárez, como ''una manifestación de protesta ante
el caos existencial que nos rodea", mientras que Olga Chorro muestra la
locura en el retrato del niño asesino, explicó Marcos. Todas
son imágenes de una realidad que ''duele y horroriza". Los demás
participantes, con sus propuestas de quemados, ahorcados, suicidas, trepanados,
armas, disecciones y cementerios, ''invitan a reflexionar sobre este mundo
oscuro, incoloro, duro e hiriente que es la muerte violenta, y nos cuestionan
sobre la deshumanización de la misma", agregó.
Reflexión por la vida
Si para la expositora Marianela de la Hoz la muerte además
puede ser violenta mediante la palabra y el pensamiento, Arturo Rivera
recordó que existe la muerte espiritual. ''¿Quién
vota por gobernator?, preguntó en referencia a la elección
de Arnold Schwarzenegger como mandatario de California: ''Sólo personas
que están mal del cerebro". Muerte, acotó, es una
reflexión ''en realidad" por la vida, porque está lleno de
espíritu. Y, arte que no tiene espíritu, concluyó,
''está muerto".
Lo que pasa en la galería José María
Velasco es para toda la ciudad, no sólo para la zona de Tepito,
recordó Carlos Jaurena, quien se mostró confiado en que Muerte
captará nuevos públicos, más allá de los que
siempre van a los museos. En lugares como el Tianguis del Chopo ya se repartieron
invitaciones y volantes entre las bandas suburbanas de darketos y heavymetaleros,
que se sienten ligados en lo cultural a ''todo lo que suene a muerte, a
oscuro".
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