Confían en que el evento impulse la cinematografía

Destacan la importancia cultural de Morelia durante inicio del festival de cine

JORGE CABALLERO ENVIADO

Morelia, Mich., 4 de octubre. Durante la inauguración del primer Festival Internacional de Cine de Morelia, el viernes por la noche en el Centro de Convenciones de esta ciudad, el mejor discurso fue el del gobernador de Michoacán, Lázaro Cárdenas Batel, al hacer un agujero en el tiempo para resaltar los 300 años de tradición histórica-artística-cultural de la antigua ciudad de Valladolid: "Durante casi 300 años la ciudad de Valladolid, hoy Morelia, fue considerada la capital cultural de la Nueva España; al amparo de su majestuosa arquitectura muchas generaciones cultivaron y atesoraron un sólido acervo de ciencia, filosofía y arte que a los mexicanos modernos todavía nos sorprenden.

''En el siglo 21, el gobierno de Michoacán se suma a la organización del primer Festival Internacional de Cine de Morelia, principalmente como vínculo de expresión artística y cultural, para contribuir a restablecer el valor de la industria del cine nacional".

Por su parte, el presidente del consejo organizador de este certamen, Alejandro Ramírez Magaña, representante de Organización Ramírez, empresa privada que financia este encuentro fílmico, ponderó el arte cinematográfico y el talento de los cineastas noveles: "Este encuentro abrirá un espacio para el joven talento cinematográfico mexicano, y al mismo tiempo abrirá un escaparate para la cinematografía nacional."

Ramírez Magaña agregó: "El festival tendrá su sede en lo que fue el Cinema Morelia, primera sala de proyección de Organización Ramírez, construido en 1956, y que fue renovado y transformado ex profeso en Cinépolis Morelia Centro, esperando que al igual que el festival este complejo cinematográfico contribuya a la consolidación del Centro Histórico de Morelia como destino turístico y cultural".

La inauguración se hizo con la proyección de Nicotina, cinta que a la mayoría gustó. Incluso entre el público estaba Cuauhtémoc Cárdenas, quien comentó: "Está buena, está buena"; pero confesó que ni con la moraleja de la película se pondría a fumar: "No fumo, ni lo haré después de la película".