Abordan en conferencia la obra y la forma de trabajo del dramaturgo sueco

El arte teatral sirve como ''termómetro en el culo de la sociedad'', define Lars Norén

CARLOS PAUL

La función del arte teatral es ''ser un termómetro en el culo de la sociedad", define el dramaturgo sueco Lars Norén, de cuya obra y forma de trabajo disertará Ulrika Josephsson, colaboradora cercana del escritor, en conferencia que se presentará hoy en El Foro, Teatro Contemporáneo.

Considerado por la crítica especializada de su país como ''el heredero de August Strindberg", Norén (Estocolmo, 1944) comenzó su carrera como poeta. A los 19 años tenía publicados más de 15 libros de poesía, entre los que destacan Revólver y Corazón en corazón.

A principios de la década de los 70 fue reconocido como el poeta más relevante de su generación. Su primera obra de teatro, El lameculos del rey, fue estrenada en 1973, ''causando gran polémica entre la crítica".

''Caníbal de la realidad''

Norén alcanzó el primer éxito en 1981 con Una terrible felicidad, dirigida por Suzzanne Osten; y desde 1978, año en que escribió La valentía de matar, hasta la fecha, ha escrito más de 50 obras de teatro, ''todas puestas en escena".

''Poco conocido en América Latina y desdeñado por los estadunidenses, su universo dramatúrgico gira en torno de los infiernos que viven la pareja, la familia, la sociedad", explica Jorge Vargas, director de Teatro Línea de Sombra, quien en la actualidad dirige el montaje de Demonios, obra del autor sueco que se presenta en el teatro El Galeón.

Su búsqueda -destaca Ulrika Josephsson- consiste en escarbar de manera obsesiva en la parte más íntima y oscura del ser humano y la sociedad, sin importar el dolor que eso provoque.

''Por ello ha hecho trabajos sobre el neonazismo, el alcoholismo o las relaciones destructivas de pareja. Y aunque es una persona amable, cálida y divertida, él se define como un caníbal de la realidad."

Una de las más controvertidas puestas en escena de Norén fue aquella en la que integró al elenco de la obra 7:3 (en referencia a un artículo del código penal de Suecia) a dos jóvenes neonazis, quienes aún cumplían condena, para que recitaran textos racistas en el escenario. En cierta ocasión, aprovechando el permiso de salida de prisión para actuar, una noche los neonazis robaron un banco y mataron al vigilante.

Proliferación de grupos independientes

Josephsson, quien hablará también sobre la estructura y el trabajo del Riksteatern (Teatro Nacional de Suecia) y particularmente de su sección Riks Drama, de la cual Norén es director artístico, comenta que esa institución cultural se divide en varios teatros: el que dirige Norén, el destinado para niños y jóvenes, el creado por y para personas sordas, el Ballet Cullberg, un teatro cuyas producciones son específicamente para giras, y otro hecho sólo por jóvenes.

''El Riksteatern -cuya sede se localiza en la ciudad de Hallunda, al sur de Estocolmo- recibe para todas esas secciones un subsidio de más de 230 millones de pesos al año."

En Suecia, añade Josephsson, ''en los años recientes ha habido una proliferación de grupos independientes. Sin embargo, hacer teatro hoy es más difícil que antes, ya que los municipios han tenido que reducir presupuestos. Se ha producido un cambio en la política cultural. Los grupos independientes, más que trabajar en un proyecto de largo plazo, ahora se dedican a proyectos de corto plazo para recibir subsidio".

La conferencia sobre la dramaturgia y forma de trabajo de Lars Norén y el Riksteatern se dictará hoy a las 19 horas en El Foro, Teatro Contemporáneo (Jalapa 121, colonia Roma).