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México D.F. Martes 30 de septiembre de 2003
DINERO
Enrique Galván Ochoa
La gasolina, al precio más alto de la historia
Magna a $6.01; Premium a 6.62
Empresas con sentido social
HOY EN LA NOCHE, COMO CADA primer día de
mes, las bombas de gasolina de Pemex serán ajustadas con el nuevo
precio. Alcanzará su máximo nivel en la historia del país:
Magna a 6.01 pesos y Premium a 6.62. Fue el presidente Zedillo, a la mitad
del sexenio, quien inventó el esquema de los aumentos mensuales.
Según explicaba el entonces secretario de Hacienda, José
Angel Gurría, era algo temporal, un sacrificio para librar el hoyo
que dejó la devaluación de la Navidad de 1994. Pero seguimos
en el hoyo y no hay indicios de que algún día vayan a poner
fin a los aumentos. Eso sí, dan ocasión para que los economistas
del Banco de México luzcan sus dotes de alquimistas, porque para
el gobernador Guillermo Ortiz la inflación llegó a su nivel
más bajo desde la creación del mundo. ¿Será
posible? ¿Inflación baja con alzas mensuales de gasolina
y de electricidad? Como dato cultural, la gasolina en Estados Unidos continúa
bajando de precio. Este fin de semana se vendía, en promedio, en
3 pesos 82 centavos el litro, la sin plomo.
Sentido social
UN GRUPO DE EMPRESAS MEXICANAS recibió del
Centro Mexicano para la Filantropía y la Alianza por la Responsabilidad
Social Empresarial un reconocimiento por su calidad de empresas socialmente
responsables. En medio ambiente fueron distinguidas la Compañía
Fresnillo y la Minera Tizapa. En la división Calidad de Vida en
la Empresa, lo fueron Manpower y Química del Rey. En el grupo Vinculación
con la Comunidad, fueron reconocidas American Express y Philip Morris México,
que patrocina el proyecto Nutrivida; Financiera Independencia, Merck Sharp
and Dohme, por su campaña "Atención integral a personas con
VIH-sida", y British American Tobbacco. Finalmente, Hewlett Packard de
México, por sus Centros Comunitarios de Aprendizaje.
Misión imposible
HACIENDA ANUNCIO AYER que es una mujer su cuarto
al bat en la posición de directora de comunicación social.
Se trata de Isabel Suárez Mier, egresada de la escuela de Ciencias
y Técnicas de la Información de la Universidad Iberoamericana,
con más de 30 años de trayectoria en el campo de la comunicación
y la publicidad. La precedieron, por riguroso orden al bat, Patricia Quesada,
egresada del ITAM, que sigue en la nómina, pero en Europa; Javier
Martínez-Ostos, también itamita, ahora en Deutsche Bank,
y el autor de libros de economía pop que batió récord
de impermanencia: estuvo menos de una semana para luego ser designado director
de Banobras. La tarea de Isabel es punto menos que imposible: tiene que
convencernos a los mexicanos de que deseamos fervientemente pagar IVA en
medicinas y alimentos.
@ e-Vox Populi
ASUNTO: EL GLAMUR
Me hizo reflexionar un artículo titulado "Marta:
el glamur en Los Pinos". En él se alaba la elegancia y el glamur
de la señora Marta, que un día se cree Evita y al siguiente
Hillary Clinton, pasando por la madre Teresa. La señora debería
saber que no porque compre un abrigo de zorro de 80 mil pesos o mande hacer
un traje a la medida con Jean Paul Gaultier, perdón, Chanel, marca
que por cierto está bastante devaluada, podrá emular el refinamiento
de la princesa Carolina o su majestad Rania, con quienes ha sido comparada
¡hazme el favor! Esas damas nacieron en la abundancia y crecieron
disfrutándola, no son gente venida a más. Lo interesante
es saber de dónde sale el dinero para esas compras, siendo que ella
no trabaja, por lo que no percibe un sueldo. Infiero que don Vicente es
el que paga las facturas. Termino con un dicho popular: ''aunque la mona
se vista de seda, mona se queda''.
Enrique Gómez, Bélgica
[email protected]
R: Caray, tocayo, me hiciste reflexionar a mí
también: ¡qué difícil es dar gusto a los mexicanos!
Hace años la crítica era para una señora que vestía
-con mucha dignidad, por cierto- prendas muy mexicanas. Ahora tampoco nos
gusta que doña Marta use ropa de marca. Sé que me van a llover
las críticas pero a mí sí me place que vista con elegancia.
Ya ves cuán lucidora aparece en su caracterización de la
reina Jefita en las Crónicas de Changarrotlán
de madam Rollé, todos los domingos, en mi columna Domingo. Por otro
lado, don Vicente se embolsa sólo de sueldo un cuarto de millón
de pesos al mes. Supongo que es más que suficiente para pagar los
trapitos de la señora.
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