.. |
México D.F. Martes 30 de septiembre de 2003
Marco Rascón
La convención y el congreso
El próximo congreso nacional del PRD no necesita organizarse porque ya está organizado: sus delegados son los mismos del anterior (se autorreligieron), las cuotas de las mafias están respetadas y las reformas son todas las violaciones acumuladas por el Comité Ejecutivo Nacio-nal, el Consejo Nacional y las comisiones de garantías y vigilancia. Y es que la extraña legalidad de la burocracia perredista ha establecido como regla de su jurisprudencia hacer reformas de los delitos.
Así, el marco legal no es otro que tapar un hoyo abriendo otro, esto es, legalizar la violación anterior. Por eso la mafia, en respeto a la ley de la omertá, acordó olvidar y enterrar el Informe de la Comisión para la Legalidad y la Transparencia que documentaría lo establecido en el séptimo congreso, que dice en su artículo tercero: "La comisión investigará las causas de fondo que han ocasionado que los procesos electorales internos del partido estén plagados de irregularidades, tipificadas como fraudes electorales, también las acciones u omisiones cometidas por las direcciones del partido, sus órganos electorales y jurisdiccionales, así como de todos los candidatos que contribuyeron a violentar las normas estatutarias".
Fue el séptimo congreso, no la comisión, el que determinó que existían irregularidades y fraudes, así como la responsabilidad de "todos los candidatos", lo cual dejó establecido que la misma presidencia y hasta el consejo nacional tenían origen fraudulento. Y hoy ese mismo consejo nacional de origen fraudulento ha nombrado una comisión organizadora para el próximo octavo congreso, integrada mayoritariamente (con excepción de Cuauhtémoc Cárdenas, Ifi-genia Martínez, Raúl Alvarez Garín y Rosalbina Garavito) por conocidos ma-paches internos, aprendices de brujos y capos de las mismas mafias que con absoluta mayoría impondrán otra simulación de refundación como la del sexto congreso, en Zacatecas. ƑQué hacer frente a esta nueva afrenta? ƑDeben los perredistas participar en esta nueva simulación y dejar intactas las reglas de origen de las propias mafias? ƑDeben los mismos responsables organizar un congreso para purificarse?
La crisis política de la estructura de fracciones en el PRD se expresó el 6 de julio e hizo renunciar a la presidenta nacional del partido. La crisis financiera se resuelve con créditos, ofreciendo los votos futuros de López Obrador, por el cual no sólo pueden comprar edificio nuevo, sino hasta aumentarse el sueldo y dar estabilidad a la nómina. Pretenden eludir la crisis jurídica, mediante un pacto ya establecido entre los capos a fin de hacer a un lado ese informe y mantener contra viento y marea un congreso nacional simulado para reformar las violaciones más escandalosas y determinar retroactivamente que lo que se juzga no procede, porque el delito del pasado ya no será ilegal en el presente, y para este fin ya también controlan por cuotas a la Comisión de Garantías y Vigilancia.
No obstante, la convención nacional va para el 24 y 25 de octubre. Su tarea no se centra en rescatar al partido de la legalidad interna, sino en elaborar los cambios estatutarios centrales y los ejes de un nuevo programa cuya visión va más allá de 2006: para el México del nuevo siglo y los objetivos de las mujeres y los hombres progresistas, de izquierda y revolucionarios. La convención, convocada el pasado 5 de mayo, debe tener una visión amplia y de largo plazo, ser propositiva, no ingenua. Su interlocutor no es la burocracia fraudulenta, sino el conjunto de fuerzas y núcleos políticos progresistas y democráticos, de dentro y fuera del PRD, que buscan desde los más variados ángulos abrir un proceso nuevo y distinto de rumbo nacional. El pasado fin de semana se desarrollaron reuniones en Hidalgo y Veracruz, donde quedó claro que no sólo nos une el registro del PRD, sino que es necesario disputar la legalidad con legalidad y hacer de la resolución del Informe para la Legalidad y la Transparencia la base de una demanda jurídica ante el Instituto Federal Electoral y los tribunales electorales, como ahí se propuso.
Si la crisis es ideológica, política y jurídica, la solución es en esa misma dimensión; sin embargo, dada la degradación de todos los órganos institucionales y jurisdiccionales del partido, la lucha trasciende el marco interno: la oligarquía intervino al PRD y ése es el problema de fondo. Las mafias proceden así porque pusieron el partido al servicio de ellos y sus intereses a cambio de sobrevivencia y privilegios personales. La corrupción se hizo ley porque parte central del proyecto ha sido corromper a la izquierda, a sus cuadros y dirigentes, así como de-mostrar que en este país nadie se salva y que todos son de la misma condición de la oligarquía. El PRD fue intervenido porque la oligarquía busca más sobrerrepresentación política y conducir al país con la subordinación de todos los partidos y el sistema político.
La convención, como proceso que es, tiene grandes tareas, pero en este mo-mento la central es organizarse y llevarla a cabo. [email protected]
|