El tema ocupa un lugar importante en la agenda de los gobiernos de países de AL, dice

Cepal: políticas fiscales responsables, vía para prevenir efectos de crisis financieras

Destaca los fondos de estabilización para amortiguar variaciones en ingresos petroleros

NOTIMEX

Santiago, 27 de septiembre. La implementación de políticas fiscales responsables ocupará un lugar cada vez más importante en la agenda de los gobiernos latinoamericanos porque es la única manera de prevenir los efectos de las crisis financieras, indicó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

De acuerdo con un estudio de la Cepal, los gobiernos de la región muestran una creciente preocupación por alcanzar mayores niveles de recaudación fiscal para combatir la pobreza y estimular el crecimiento económico.

El organismo precisó que en los pasados años la política fiscal de los países latinoamericanos se desarrolló en un "difícil escenario macroeconómico", por un menor dinamismo en Estados Unidos y la caída en el intercambio de las economías no petroleras.

En el Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2002-2003, la Cepal indicó que estas circunstancias "afectaron de manera directa o indirecta los ingresos fiscales en casi todos los países de la región y aumentaron la demanda de políticas asistenciales".

La Cepal realizó una mención especial y elogió en su informe el diseño de la política fiscal chilena, la cual incluyó una "norma de superávit estructural" a partir de la cual las finanzas públicas ejercieron un papel estabilizador en años recientes.

Mencionó que las reformas estructurales aplicadas en Chile tendrán como uno de sus efectos una merma de ingresos fiscales por unos 430 millones de dólares al año por la firma de acuerdos de libre comercio con Estados Unidos, la Unión Europea y Corea del Sur.

Para compensar esos ingresos que dejará de percibir, Chile aplicará a partir del mes próximo un alza de un punto porcentual en el IVA, cuya tasa ascenderá de esa manera a 19 por ciento.

De esta forma, el gobierno chileno espera mantener e incluso ampliar programas sociales como el denominado Plan Auge (en materia de salud) y otro dirigido a las familias más pobres del país, que recibirán ayuda directa para alimentación.

De acuerdo con la Cepal, el manejo fiscal ha otorgado a Chile un importante margen de autonomía y maniobra.

En contraste, en otros países de la región la política fiscal "perdió grados de libertad" por la ejecución o negociación de programas restrictivos con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El diseño de las estrategias "ha estado fuertemente condicionada por la propia crisis macroeconómica", lo que derivó en una permanente presencia del FMI para negociar acuerdos en materia de política fiscal, afirmó el organismo de Naciones Unidas.

Precisó que buena parte de las reformas tributarias realizadas en los países latinoamericanos aumentaron la participación del impuesto al valor agregado (IVA) en las estructuras tributarias y "aumentaron el carácter procíclico de las finanzas públicas".

Mencionó como ejemplo el caso de Brasil, donde "se está encarando la transformación en el IVA de un antiguo tributo que grava en cascada diferentes actividades productivas", lo cual incide en la eficiencia del gasto social.

En Paraguay y Venezuela, en tanto, se incrementó la tasa del IVA, mientras que otros países "están encarando mejoras en la administración tributaria que se espera sean de efecto permanente", como en Bolivia y Uruguay.

La Cepal también mencionó la introducción, hace algunos años en varios países de la región, de varias modalidades de fondos de estabilización destinados a amortiguar las variaciones en los ingresos fiscales provenientes del sector de hidrocarburos.

Entre ellos se encuentran el Fondo de Ahorro y Estabilización Petrolera de Colombia (1995), el Fondo de Inversión para la Estabilización Económica en Venezuela (1998) y el Fondo de Estabilización de Ingresos Petroleros en México (2000), entre otros.