Queremos una reforma que abra el apoyo a las inversiones, dice David Penchyna

Prepara el PRI esquema que "genere certidumbre"

ROBERTO GARDUÑO

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) elaborará una propuesta para impulsar la participación de capital privado en infraestructura energética "sin que esto implique abrir la puerta a la privatización", manifestaron priístas, quienes consideraron que la convocatoria a una asamblea nacional del tricolor con objeto de modificar sus estatutos se ve lejana e innecesaria.

Luego que la dirigencia nacional priísta dijo al presidente Vicente Fox, que sólo sus órganos de dirección interna -consejo político y asamblea nacional- tienen la atribución para modificar los documentos básicos que impiden la privatización del sector energético nacional, ayer en el PRI se informó que la nueva opción para "generar certidumbre" en el país será elaborar una propuesta con la que no se vulnere ni la Constitución Política ni los estatutos.

David Penchyna Grub, secretario técnico del consejo político nacional, adujo que "la visión del PRI está en buscar reformas que mejoren la competitividad del país. Queremos una reforma que abra el apoyo a las inversiones y garantice energía para el desarrollo de la industria, y sobre todo para el abasto de todas las familias mexicanas".

El ex diputado federal por Hidalgo sostuvo que en su partido no existen diferencias irreconciliables en torno al futuro el sector energético. Al señalársele la posición de Manuel Bartlett, respondió: "La actitud del senador es nacionalista, innovadora y pretende para el país conservar su soberanía y su capacidad de decidir. Sin duda él, como gran activo e influyente cuadro en las filas de nuestro partido, se mantiene en esa tesitura y, junto a nosotros, sólo piensa en los intereses de la nación. La unidad en el PRI es evidente, y en este tema debe ser un mensaje para aquellos que atacan y critican a Manuel Bartlett".

En el seno del consejo político nacional ya se inició un proceso de análisis y discusión para consensuar una propuesta que dé "certidumbre" a las tareas de generación de electricidad y de hidrocarburos. De esa forma el priísmo conseguiría evitar la convocatoria a su asamblea nacional vía el consejo y, por tanto, los estatutos permanecerían como se encuentran. Inclusive en términos de organización, la dirigencia nacional carece recursos económicos suficientes para movilizar a sus más de 10 mil dirigentes en todo el país, sin importar que los encuentros fuesen regionales.

Roberto Campa, diputado federal, informó que la posición del PRI es lograr un equilibrio entre la soberanía nacional y la inversión privada: "El riesgo es que en un futuro no tengamos electricidad en los próximos 10 años, esa es la realidad que debemos contemplar, el tema es: Ƒcómo hacemos compatible la inversión privada y sostener la propiedad de la infraestructura?"