Espina "tiene amnesia"; él defendió el débito solicitado

El PAN falsea los datos sobre la deuda del DF: diputados del PRD

RAUL LLANOS SAMANIEGO

La deuda del gobierno de la ciudad está en niveles "manejables", afirmaron ayer diputados locales del PRD en conferencia de prensa. Rechazaron que las finanzas del DF dependan de los recursos que obtiene la administración local mediante endeudamiento, y aseguraron que las críticas de los legisladores del PAN en esta materia obedecen a cuestiones políticas.

Francisco Chiguil, Guadalupe Chavira, Alfredo Hernández Raigosa, Juventino Rodríguez, Pablo Trejo y Araceli Vázquez señalaron que la deuda de la capital "es la más vigilada" del país, pues en ella tienen injerencia la Secretaría de Hacienda, la Cámara de Diputados y la Contaduría Mayor de Hacienda de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), y de haber alguna anomalía no le hubieran dado el rango de triple A las calificadoras internacionales Fitch, Moody's y Standard & Poor's.

En días recientes, diputados del PAN en la ALDF, encabezados por su coordinador, José Espina, manifestaron que el monto de la deuda local muestra un nivel preocupante, que pone en riesgo la estabilidad financiera de la ciudad, por un "manejo irresponsable" durante esta administración. Durante la conferencia de prensa de ayer, Chiguil expresó que los panistas "falsearon" los datos y "engañaron" no sólo a los medios de comunicación sino a la sociedad, pues manipularon la información para ajustarla a sus propios intereses de "golpear al gobierno de esta capital" y presionar con ello a la Cámara de Diputados para que niegue el dinero requerido para obras.

Dijo que comparar el débito del DF con el de otras entidades es "totalmente ilógico", pues varía según el número de habitantes y su contribución al producto interno bruto; por lo tanto, las necesidades de infraestructura y la capacidad de pago "difieren enormemente". Añadió que mientras en esta ciudad el saldo de la deuda representa sólo 3 por ciento de su PIB, en el caso de la Federación esta relación es de 25 por ciento, sin considerar los pasivos del Fobaproa y del IMSS.

Juventino Rodríguez comentó que antes de 1997 la Federación absorbía el monto total de la deuda del entonces Departamento del Distrito Federal, y posteriormente la dejó bajo la "absoluta responsabilidad de las autoridades electas democráticamente". Alfredo Hernández agregó que es "moralmente procedente que el gobierno federal asuma parte de la deuda y se le quite esa carga a la administración local".

Guadalupe Chavira resaltó la contribución de las delegaciones al endeudamiento del Gobierno del DF, y precisó que los mayores montos asignados de estos recursos se orientaron hacia las demarcaciones panistas. Sostuvo que "a José Espina ya se le olvidó, parece que tiene amnesia, porque él fue uno de los delegados (en Benito Juárez) que fueron a la Cámara de Diputados a defender el derecho de esta ciudad a que se le asigne el monto de deuda solicitado".

Aunado a ello, añadió, varios jefes delegacionales del blanquiazul incurrieron en subejercicio de los recursos de deuda asignados, y citó como ejemplo Alvaro Obregón, que debió regresar parte de lo que se le entregó para obras. Al respecto, Chiguil indicó que parte del monto aprobado por la Cámara de Diputados en 2002 se erogó en proyectos relevantes, como la adquisición de 45 trenes del Metro y la construcción de planteles educativos, plantas de bombeo de aguas residuales y ampliación de los reclusorios varonil y femenil de Santa Marta Acatitla, así como a la adquisición de camiones de bomberos y autobuses, y la ampliación de la red de semáforos computarizados de la ciudad.