Hoy concluyen audiencias públicas en el caso Kelly

Colaborador de Blair habría alterado expediente sobre Irak

AFP, DPA Y REUTERS

Londres, 24 de septiembre. Un cercano colaborador del primer ministro británico, Tony Blair, ordenó en el último minuto que se modificara un expediente gubernamental sobre el presunto arsenal de Irak, para forzar una decisión en favor de la invasión al país árabe, reveló este miércoles la prensa británica.

En tanto, la Agencia Central de Inteligencia estadunidense (CIA) señaló, al comentar un informe preliminar del ex inspector de armas David Kay sobre armas de destrucción masiva, que "no esperamos que llegue a conclusiones definitivas, ni que descarte nada".

Kay -quien dirige las investigaciones estadunidenses sobre esas armas- continúa recibiendo información del terreno y su informe será solamente sobre los "primeros avances", añadió el vocero de la CIA, Bill Harlowm, en una declaración.

Sin embargo, un alto funcionario de la administración del presidente George W. Bush, que pidió el anonimato, dijo que "es prematuro que alguien comience a decir lo que hay o no hay en ese informe".

Washington y Londres hicieron de la supuesta existencia de armas de destrucción masiva en Irak el argumento para fundamentar la invasión a ese país.

En septiembre de 2002 el gobierno británico presentó un informe que alertaba contra esas armas. En víspera de su publicación, parte esencial del expediente habría sido cambiada por intervención de Jonathan Powell, jefe del gabinete de Blair, según un correo electrónico revelado durante la investigación de la muerte del especialista en armas químicas y biológicas David Kelly.

En el correo electrónico Jonathan Powell advertía que los términos empleados en el expediente, según el cual "Saddam Hussein emplearía sus armas químicas y bacteriológicas sólo si es atacado", podía ser utilizado por las personas opuestas a la guerra.

En el mensaje, dirigido el 19 de septiembre a John Scarlett, el número uno de los servicios de inteligencia británicos, Powell señalaba que esa frase "era un asunto problemático" y pedía en forma apremiante que se rescribiera.

Efectuada la modificación solicitada por Powell, el documento, en su versión definitiva, publicada el 24 de septiembre, afirmó que "Saddam (quiere) utilizar armas químicas y bacteriológicas, inclusive contra la propia población chiíta", afirmó la prensa británica.

La comisión que investiga el suicidio de Kelly finalizó hoy la recolección de testimonios con las declaraciones del presidente de la cadena BBC, Gavin Davies, quien defendió la independencia de la radiotelevisora pública británica y la credibilidad de sus periodistas.

Davies justificó la reacción del "consejo de gobernadores" de la BBC, que él mismo preside, que apoyó totalmente el reportaje del corresponsal Andrew Gilligan emitido a finales de mayo, en el que acusó al gobierno de Blair de exagerar el informe de septiembre sobre la amenaza iraquí.

"Considero que es razonable pensar que el público esperaba que los gobernadores tomasen partido en favor de la independencia de la BBC", explicó Davies. En especial cuando, según él, la cadena sólo transmitió la opinión de una fuente anónima -que el Ministerio de Defensa luego identificó como Kelly, sin advertirle al científico- pero en ningún caso "puso en duda la integridad del primer ministro". La BBC, dijo su presidente, no es la "emisora gubernamental".