Noche de rocanrol

Radioactivo festeja con Kings of Leon

JORGE CABALLERO

La noche del lunes en la ciudad de México fue de rocanrol químicamente puro, sabroso y bien ejecutado, pues el cuarteto estadunidense Kings of Leon se presentó en el Salón 21 para sorprender a propios y extraños, deshaciendo sus dos guitarras trepidantes y marcar el ritmo con un bajo desquiciante y potente bataca delirante. La tocada se organizó como parte de los festejos del 11 aniversario de la estación juvenil más importante del cuadrante: Radiactivo 9/85.

Fue una noche en la que el fiel público de la emisora radiofónica coreó, brincoteó, aplaudió y se deschongó por 50 minutos, o sea, con todas las rolas del disco debut de Kings of Leon, Youth and young manhood. Los temas Red morning light, Molly's chambers, Spiral straircase y el devastador éxito California waiting, sublimaron los enardecidos ánimos de los asistentes, quienes festejaron, aventaron vasos con hielo por encima de las cabezas en la parte del mosh pit y del escenario.

Fue una noche en la que la actitud/apariencia de los Kings of Leon recordó a los Ramones con sus melenas discretas, pantalones de mezclilla y camisetas compradas como en la cháchara, con sus canciones rápidas de rocanrol. Noche de brincos, de frenesí desbordado de mujeres con torsos desnudos sobre los hombros de sus machos, de barra libre de tequila y ron, de, en resumen, rocanrol.