José Cueli

Espectrografías

Recientemente apareció en librerías la versión en español del libro Espectrografías. (Desde Marx y Derrida) en edición de Cristina de Peretti (Trotta, 2003), que resulta ser una lectura acuciosa del libro Espectros de Marx, de Jacques Derrida, publicado en Francia en 1993. En esta compilación escriben varios autores que si bien comparten una franca filiación derridiana, lo hacen desde su perspectiva, lo cual desemboca en un discurso de voces y pensamientos heterogéneos que enriquece aún más la reflexión.

El libro de Derrida versa sobre una franca denuncia de la hegemonía de una democracia neoliberal y neocapitalista que se presenta como la única perspectiva política, social y económica que lejos de remediar los graves problemas económicos mundiales los ha acrecentado e intenta disimular las injusticias, las miserias y la violencia que se ciernen sobre un gran sector de la población mundial que se empobrece, si cabe, cada día más.

Derrida intenta reivindicar un cierto espíritu de Marx y convoca a aprender a vivir con los espectros para ''un ejercicio responsable de la memoria y de la herencia, al tiempo que la espectralidad o (fantología) vienen a desbaratar toda onto(teo)logía".

Con respecto a Espectrografías, de Peretti, comenta: ''El grupo Decontra empezó a gestarse allá por los años 1990-1991 y 1991-1992, a raíz de un curso de doctorado sobre Traducción y deconstrucción impartido en el Departamento de Filosofía de la UNED (...) El libro que ahora publicamos es el resultado de la labor de reflexión y discusión que los actuales miembros del grupo llevamos a cabo durante el curso 2001-2002, dedicado en exclusiva a la lectura de Espectros de Marx, de Jacques Derrida".

El texto que abre el libro es el de J.M. Ripalda sobre el Espíritu/espectro de Chris Hani. Destaca que el libro de Derrida resultó odioso e irritante para aquellos para quienes Marx sigue siendo objeto de odios, rencores y rechazos y el lugar donde puede proyectarse el origen de todos los males. Así, Ripalda dice: ''Las vidas concretas pasan a segundo término frente a las necesidades de mantenimiento del statu quo actual, convertidas en quantité négligeable. Los cuerpos reales, sustituidos por su realidad burocratizada y mediática, se convierten en objetos virtuales de vejación y tortura frente al cuerpo ideal del Estado, la ley y el orden. Y este cuerpo se viste de la opulencia, el lujo, la representación de saber y cultura, las ceremonias y los uniformes, como el vampiro que vive de víctimas a las que inclusive suplanta (a tanto no llegó el monstruo de Transilvania) [...] Cuanto más demoniaco se hace lo excluido, tanto más angélico lo que lo tapa y excluye".

Así por más que los medios y la violencia del Estado se empeñen en hacernos comulgar con sus montajes, sus hipocresías y mentiras, resulta innegable que los espectros y sus espíritus retornan y siguen haciendo un efecto en el devenir de la historia. Ripalda cita el gran texto derridiano Glas (sobre Hegel) que literalmente en francés quiere decir ''toque de almas" y que es ''una gran experiencia radical de la muerte y el duelo que, a la vez que mantiene todo su rigor, acoge un Eros y un deber sin restricciones. Esta experiencia centra la lectura de Hegel para hacerle justicia no conforme a los cánones de la hermenéutica, sino como diría Blanchot, a una comunidad inconfesable".

Hegel, Heidegger, Marx y el propio Hani son espectros/espíritus que retornan, que siguen presentes aun en ausencia y por más que se afanen los discursos oficiales con su prepotencia en silenciarlos, no lo conseguirán.