México D.F. Lunes 8 de septiembre de 2003
BALANCE DE LA JORNADA
Marlene Santos A. y Carlos Hernandez
América, aún lejos de la espectacularidad
LAS VICTORIAS DE América, Chivas, Pumas
y hasta del campeón Monterrey son un alentador indicativo del repunte
que puede tener el torneo cuando casi se ha disputado un tercio.
EL CLUB DE Coapa enfrentó con buena movilidad
a un Irapuato que estuvo lejos de sus mejores actuaciones. Con apuros rescató
la victoria para terminar defendiéndose en una estampa indigna de
su grandeza, pero comprensible porque para el conjunto de Televisa la consigna
desesperada era ganar o ganar. Desde hace un par de fechas el equipo venía
jugando bien, pero el gol se le negaba.
AHORA
FALTA QUE sus delanteros acaben de despejarse las brumas y telarañas,
y los Blanco, Patiño, Mendoza y Abreu aclaren la vista ante la meta
rival para acercarse un poquito al equipo espectacular que prometió
Javier Pérez Teuffer con el retorno de Leo Beenhakker.
CON CHIVAS FUE visible el aporte de Juan Francisco
Palencia en el ánimo general y por su despliegue en la cancha. Queda
claro que al atacante surgido en Cruz Azul le hacía falta un cambio
de aires. Ahora con la playera en azul, rojo y blanco volvió a mostrarse
como un jugador de fuerza y entrega. A fin de cuentas a nadie le importa
que haga declaraciones, bastará con que hable en la cancha.
PUMAS, QUE ANDUVO de bajo perfil en las tres fechas
anteriores con dos empates y una derrota, aprovechó los descuidos
de Jaguares para volver a la senda goleadora, pero la grata victoria de
los auriazules fue opacada por el disparate mayúsculo de Hugo Sánchez,
quien tuvo el desatino de pedir que se eche del país a Ricardo Antonio
La Volpe, en un gesto que rebasa sus anteriores y constantes sandeces.
NI POR LA ETIQUETA de máxima figura del
balompié mexicano se le puede tolerar esa actitud tan fuera de lugar
en su posición de timonel del equipo de la máxima casa de
estudios del país. La conclusión inevitable deriva en un
urgente mensaje a la directiva del club: a Hugo le urge un asesor; no es
contra La Volpe sobre quien debe apuntar su artillería.
MAS QUE DEL seleccionador nacional, la culpa de
que -en efecto- no haya figuras en el balompié actual es de las
directivas de los equipos, como la del Cruz Azul que un tiempo engañó
a todos al decir que tenía la intención de mexicanizar su
plantel. La realidad es que hoy tuvo que suspender su partido de la fecha
seis porque se fueron con sus selecciones Alex Aguinaga, Daniel Díaz,
César Delgado y John Restrepo.
QUERETARO Y ATLAS siguen en picada. Gallos Blancos
acaparó notas durante la semana por la venta que este domingo se
hizo oficial. El mítico Tío, empresario jalisciense,
traspasó al deprimido club que cosechó una derrota más
y Alfredo Tena enfrentará una situación nada envidiable.
EL ATLAS TAMPOCO da una y lo más seguro
es que si opta por cesar a Fernando Quirarte tendrá en puerta otra
demanda por adeudo salarial.
LA FMF Y sus directivos Alberto de la Torre y Víctor
Garcés fueron rebasados en su torpe intento por sofocar el candente
tema del espionaje telefónico entre los árbitros y la cada
vez más intolerante posición de Edgardo Codesal. Tan se les
fue de las manos que la empresa Telmex se apresta a dar una conferencia
para explicar los tecnicismos que se requieren para intervenir una línea
telefónica.
DE LA TORRE, quien en corrillos es criticado por
su antigua tendencia en sus negocios privados a "esconderse en sus bodegas
de los cobradores" -reveló un directivo que pidió el anonimato-,
no varía mucho su forma de conducirse como titular de la federación,
pues con frecuencia elude hablar con la incómoda prensa de la capital
y prefiere hacerlo en Guadalajara.
Y EN EL diferendo entre Codesal y Ramos Rizo sus
bandazos declarativos fueron desde negar el asunto, darlo por cerrado,
indicar que irían a las últimas consecuencias y conminar
a Felipe Ramos a no hacer una denuncia ante la PGR... no fuera a destaparse
la cloaca.
LO CIERTO ES que Codesal colmó el vaso y
una vez más mostró una actitud exenta de diplomacia y conocimiento
de la legalidad. El ginecólogo de profesión no sabe cuándo
se debe dar un paso al frente o al lado y quedó entrampado.
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