El gobierno estatal anuncia programa para "dignificar" a ese sector

Víctimas de explotación, 40 mil jornaleros agrícolas hidalguenses, según Sedeso estatal

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Pachuca, Hgo., 7 de septiembre. La Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) en el estado elaboró un diagnóstico sobre la situación de jornaleros agrícolas hidalguenses, en el cual señala que cerca de 40 mil laboran hasta 10 horas diarias durante los siete días de la semana, sin prestaciones ni servicios básicos. En el reporte además se acotó que los jornaleros sufren maltratos físicos y verbales por sus patrones, presentan problemas de salud "y las niñas y niños sufren violaciones".

En su estudio, la Sedeso hidalguense indicó que la situación de los jornaleros ha derivado en que anualmente se presenten más de 2 mil denuncias por diversos abusos, de las cuales mil 575 se refirieron en 2002 a salarios no pagados y descuentos injustificados, 420 por jornaleros "desaparecidos" y 105 fallecidos.

La dependencia destacó que la mayoría de jornaleros -que forman familias completas con niños- salen anualmente a zonas de cultivos en estados del norte del país y la Comarca Lagunera, son indígenas y hablan náhuatl.

Añadió que Hidalgo se ubica en el sexto lugar entre las entidades mexicanas con población jornalera, y que la parte de donde más gente sale es la Huasteca, donde cada semana, en las entradas de gasolineras, se estacionan camiones de redilas listos para "enganchar" a los trabajadores agrícolas.

Al respecto, la Sedeso estatal mencionó que otros problemas que sufren los jornaleros agrícolas son ocasionados por contratistas o enganchadores, que se encargan de reclutar a la gente para enviarlos a los campos de labranza, a quienes se cobra por el viaje, el hospedaje, la alimentación y la contratación.

"En muchos de los casos, lo que ganan lo tienen que pagar por el 'préstamo' que hace el enganchador, que a su vez recibe una paga del dueño de las tierras", afirmó en entrevista el gobernador Manuel Angel Núñez Soto, quien anunció un programa de dignificación de la vida social y económica de este sector de la población.

De acuerdo con el mandatario, el enganchador resulta necesario para los jornaleros agrícolas, quienes lo requieren para ser contratados, "pero si ganan 600 pesos a la semana terminan pagando 500 y regresan con 100 pesos a su tierra", pues, por otro lado, los alimentos que les venden en los campos de cultivos, en virtuales tiendas de raya, son más caros que en una tienda normal, señaló.

Tan sólo en la Huasteca operan unos 200 enganchadores, que son parte de la cadena de explotación de los indígenas que por falta de oportunidades deben emigran con toda su familia en busca de trabajo, se acotó en el escrito de la Sedeso.

En un intento por romper con esta cadena de abusos en contra de los jornaleros agrícolas, Núñez Soto anunció la creación de tres centros de atención a jornaleros agrícolas hidalguenses, que se instalarán en Tlanchinol, Yahualica y Huejutla, con los que se buscará "dignificar y regular" la actividad económica, que genera a los jornaleros ingresos por más de 160 millones de pesos anuales.

El mandatario precisó que la inversión inicial para infraestructura, mobiliario y equipo de transporte hacia los centros será de 2 millones 980 pesos, "más un millón 870 mil pesos en capital revolvente", es decir, anticipos, salarios y viáticos. Añadió que el costo anual de operación será de un millón 200 mil pesos.

De acuerdo con el plan del gobierno de Hidalgo, 70 por ciento de las acciones de los centros de atención a jornaleros agrícolas serán financiadas por la empresa contratante, y se buscará que los jornaleros "gocen de los beneficios de las políticas estatales de desarrollo social y humanitario cuando estén en su estado, o cuando salgan a ganarse el sustento de su familia", comentó Núñez Soto.