México D.F. Domingo 7 de septiembre de 2003
Ocho nietos del autor de El viejo y el mar se disputan 7 y medio millones de dólares
Pelean herencia de hijo transexual de Hemingway
DPA
Ocho nietos de Ernest Hemingway, descendencia de su hijo menor, están peleando para mantener el control de la propiedad de 7 y medio millones de dólares dejada por Gregory, su padre, quien se convirtió en Gloria Hemingway después de su operación de cambio de sexo.
Su cuarta esposa, Ida, de la que se divorció, acudió a las cortes para reclamar la mayor parte del terreno que tenían después de la operación.
Gloria Hemingway murió en una prisión de Miami en 2001, a los 69 años de edad, luego de haber sido arrestada por cargos de indecencia, cuando se quitó su vestido rosa, ropa interior de mujer y tacones altos, y se tumbó desnuda en una calle.
Un juez del circuito de Miami-Dade, Arthur Rothenburg, le ha ordenado a los abogados que investiguen en el tema "de vanguardia" de los matrimonios entre personas del mismo sexo para establecer si Ida era realmente una cónyuge y tenía derecho a una parte de la fortuna.
Los hijos de Gregory dicen que la segunda boda en el estado de Washington en 1997 no fue válida legalmente. También acusan a Ida de presentar un documento falsificado para reforzar sus pretensiones.
El testamento de Gregory Hemingway, escrito en 1994, dividía su patrimonio entre Ida y sus ocho hijos -siete de ellos, de sus tres matrimonios anteriores, y un hijo adoptado. Al año siguiente, después del divorcio, Ida recibió una sentencia que la excluía de cualquier otra ganancia en el testamento.
Después de la muerte de Gregory, Ida presentó una enmienda al documento original, que le dejaría mil dólares a cada uno de los ocho hijos, 20 mil a un amigo y el resto para ella. El juez Rothenburg desechó esta propuesta el lunes pasado y le encargó a un mediador que resolviera la cuestión de los matrimonios entre personas del mismo sexo, para tratar de eludir un juicio completo en octubre.
Nacido en Kansas City en noviembre de 1931, hijo de la segunda esposa de Ernest Hemingway, Pauline Pfeiffer, Gregory fue el más pequeño de los tres hijos del novelista. Cuando tenía 20 años fue a África a trabajar como aprendiz de cazador, matando 18 elefantes en un mes. La bebida le impidió que obtuviera una licencia profesional de cazador. Se volvió doctor en Nueva York pero perdió su licencia, también por culpa del alcohol.
En su best-seller de 1976 Papá: un recuerdo personal, rememoraba a su padre como un hombre "amable, gentil" que lo llevó a pescar y cazar, y que una vez lo salvó de un tiburón. Pero cuando tenía 10 años, su padre dijo que Gregory tenía el "lado más oscuro en la familia" con excepción de él mismo.
Luego de la muerte de Pfeiffer, en 1951 -se colapsó durante una pelea por teléfono con Ernest sobre el problema de drogas de Gregory-, los dos hombres se culparon mutuamente por lo ocurrido. Gregory escribió cartas acusando a su padre de ser un "alcohólico enfermo" y descalificando El viejo y el mar como un "compendio enfermizo de melcocha sentimental".
Hemingway se suicidó de un balazo en 1961. "Nunca me sentí responsable por ello", escribió su hijo.
Después de tres matrimonios, Gregory se casó con Ida Mae Galliher, en 1992. Cinco años antes había declarado al Washington Post: "He gastado cientos de miles de dólares tratando de no ser un travesti. Es una combinación de factores, para empezar tienes a este padre, que es super-masculino".
Cuando murió, cinco días después de haber sido arrestado, el centro de detención femenil de Miami-Dade confirmó que la cirugía le había dado a Gregory -para ese entonces conocido como Gloria- los atributos físicos de una mujer, y que había muerto por alta presión arterial y una enfermedad cardiaca.
© Guardian Newspapers Limited 2003 Traducción: Fernando Camacho Servín
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