México D.F. Viernes 5 de septiembre de 2003
Las recomendaciones del organismo no se traducen en soluciones, sostienen
Piden ONG a Soberanes dejar de ser un lastre para la reforma de la CNDH
El ombudsman se ha opuesto a establecer un acuerdo de cooperación con la ONU
ANGELICA ENCISO L.
Organizaciones no gubernamentales (ONG) demandaron al presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes Fernández, que deje de ser un lastre y haga a un lado las resistencias al cambio del sistema. Señalaron que el organismo no garantiza imparcialidad y las recomendaciones no se han traducido en soluciones, razón por la cual requiere una profunda reforma.
En conferencia de prensa, Edgar Cortés, del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, afirmó que debe haber una modificación de la práctica permanente en la CNDH: "Esperaríamos que fuera el motor en la promoción de los derechos humanos en México, y en este momento no está tomando ese papel".
Recordó que en 2004 concluye la gestión de Soberanes al frente de la CNDH y se abre un periodo en el que las organizaciones civiles y la sociedad emprenderán un proceso de evaluación de la labor realizada. Precisó que el organismo tiene un presupuesto de 575 millones de pesos, aproximadamente 60 millones de dólares, lo cual representa casi el triple de lo que ejerce la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, pero ese monto no se corresponde con la eficacia que ha mostrado.
Las agrupaciones que forman parte del comité de enlace del Acuerdo de Cooperación Técnica (ACT) con la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas, sostuvieron que Soberanes se ha opuesto al establecimiento del propio ACT, en el marco del cual se elaboró un diagnóstico sobre la situación de los derechos humanos en México y el programa nacional respectivo.
En un comunicado que leyó el sacerdote Miguel Concha, del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, se mencionó que en la segunda fase del ACT, la CNDH se opuso a la participación de las ONG en el punto referente al fortalecimiento de la propia comisión, y en la Cámara de Senadores argumentó problemas de inconstitucionalidad, porque el Ejecutivo federal y el gobierno debían elaborar el programa nacional.
Dijo que "es indudable que a pesar de que el país cuenta con el más grande sistema de ombudsman del mundo, éste necesita una reforma profunda que le permita ser auténticamente independiente. A nadie escapa la falta de capacitación e independencia de los funcionarios y las graves deficiencias de la CNDH y las comisiones estatales".
Cortés dijo que la CNDH se asume como responsable de vigilar al gobierno, pero tiene la idea de que a ella nadie la debe escudriñar y además no ha sido capaz de garantizar la imparcialidad. También participaron la Liga Mexicana de Defensa de los Derechos Humanos, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, y la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos.
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