Un consenso de los 146 países podría beneficiar a laboratorios mexicanos

Patentes de medicamentos, tema clave en la reunión de la OMC en Cancún

Si no se logran acuerdos, se perderá interés en otros asuntos, considera el director del IMPI

ANGELES CRUZ

Uno de los temas "pivote" de la próxima reunión de la Organización Mundial de Comercio (OMC) es el relativo a las patentes de medicamentos para controlar enfermedades graves como el sida. Un consenso de los 146 países miembros podría favorecer a los laboratorios mexicanos al darles la posibilidad de producir fármacos con patente para venderlos en los países africanos, donde la pandemia afecta a 30 millones de personas.

Jorge Amigo Castañeda, director general del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), explicó que junto con el de la agricultura, el tema de las patentes de medicinas es de los asuntos torales de la reunión ministerial. De hecho, si los países miembros no logran algún acuerdo a este respecto, se perderá el interés por tratar cualquier otro asunto, dijo.

A partir de la crisis generada por el sida en el continente africano, diversos países iniciaron un análisis respecto del acceso de medicamentos protegidos por patentes. El tema fue llevado a la OMC en noviembre de 2001. Durante la reunión de Doha, Qatar, las naciones miembros suscribieron un acuerdo mediante el cual se comprometieron a realizar acciones encaminadas a enfrentar los problemas de salud pública.

El artículo sexto de la declaración reconoce que los integrantes de la OMC sin capacidad o con capacidad insuficiente de producción en el sector farmacéutico, pueden enfrentar serios problemas para hacer uso efectivo de las licencias obligatorias de medicamentos, por lo que se instruyó al consejo a encontrar una solución expedita al problema. Asume que la protección de la propiedad intelectual es de importancia fundamental para la innovación y en particular el desarrollo de nuevos medicamentos.

La iniciativa consensada hasta ahora entre 145 países -Estados Unidos está en contra- consiste en permitir que laboratorios copien los medicamentos innovadores con patente en vigor para combatir enfermedades como el sida, la tuberculosis y el paludismo y las vendan en los países pobres.

La OMC se planteó el mes de enero de 2005 como plazo para concretar el convenio. Sin embargo, señaló Amigo Castañeda, todavía falta definir la lista de los países que podrían fabricar las medicinas, el tipo de enfermedades que provocarían una crisis de salud pública a las naciones y los países beneficiarios de este esquema.

Además tendrían que incorporarse mecanismos efectivos para garantizar que el fármaco llegue a los países que realmente lo necesiten y evitar la rexportación, según las condicionantes que Estados Unidos ha puesto en la mesa de discusiones.

En los pasados dos años las negociaciones han sido intensas y complejas, porque de prosperar el acuerdo implicaría trastocar el sistema de patentes y legalizar las importaciones paralelas, prohibidas hasta hoy, detalló el funcionario.

Aunque para los laboratorios mexicanos podría representar un nicho de oportunidades, tendrá que valorarse a profundidad el tema porque sentaría un precedente. En el futuro podría aplicarse un esquema similar para cualquier otro asunto, como los derechos de autor sobre obras literarias, por ejemplo.

Amigo Castañeda puntualizó que México no sería considerado entre los posibles beneficiarios del convenio, toda vez que "no existe una pandemia" como la africana y tampoco estamos entre los países considerados pobres.