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México D.F. Lunes 4 de agosto de 2003
El artista mexicano radicado en Italia regresa al país
Raymundo Sesma expone en el MAM
MERRY MAC MASTERS
La exposición antológica que Raymundo Sesma (San Cristóbal de las Casas, 1954) -con obra de 1989 a la fecha, entre pintura, video y libros, incluso dos en braille- inaugurará el miércoles en el Museo de Arte Moderno, servirá, en primer lugar, para presentar su trabajo en gran escala al público mexicano. Este artista visual es más conocido fuera del país, ya que desde 1980 vive gran parte del tiempo en Italia. Incluso, cuando participó en la Bienal de Venecia de 1986, invitado por Gilo Dorfles, nadie lo ubicaba.
Una de las primeras exposiciones en México con obra de Sesma fue hace 21 años, en el Museo Universitario del Chopo. Se trataba de la generación emergente de entonces. Cuando el creador contemplaba en El Chopo su obra, dos pinturas de gran formato, llegó Rufino Tamayo, le tocó la espalda y preguntó: ''Ƒusted es el artista de los cuadros?'' Tras ese encuentro, Tamayo invitó al joven a su casa: ''Platicamos de Italia. Después encontramos que había exhibido en la misma galería en Florencia donde él hace muchísimos años, El Bisonte. Me preguntó qué galería me representaba en México. Ninguna, contesté, porque no conocen mi trabajo. Me dijo que tenía que exhibir. Regresé a Italia. Después de unos meses Tamayo me escribió y me dijo que ya tenía una exposición para mí en la galería Kin. Hice una muestra allí y después dejé de exhibir hasta que hice una exposición con Ramis Barquet en Monterrey y luego empecé a trabajar con Nina Menocal''.
Respecto de su estancia en Italia -primero se fue a Canadá-, Sesma recuerda que hace 25 años era difícil conseguir información sobre lo que se hacía en arte en el resto del mundo. Además, ''no conocía ni estaba en el gremio de los artistas relevantes, incluidos Corzas, los Coronel, Felguérez, etcétera. Entonces decidí estudiar de primera mano las obras de arte".
Para Sesma todo trabajo artístico es producto de la experiencia personal. Explica: ''el hecho de que me haya ido de México no significa que me haya desprendido de mi cultura. En Italia me sorprendió, aparte de su pintura, la conciencia política y social. La libertad de la mujer y los derechos humanos fueron temas que aprendí a discutir, así como decir las cosas como son".
La devaluación del peso en 1982 lo motivó a quedarse en Italia: ''Quebraron al país y empezó la migración. Alrededor de eso me fui dando cuenta también de que, como artista, uno no puede ignorar lo que pasa en su vida. Entonces, de qué manera se codifica toda esa información y tu trabajo se vuelve consecuencia de lo que pasa fuera y lo que te pasa a ti mismo".
Más que de protesta, para Sesma su obra es resultado de una reflexión. En 1995 fundó Advento, proyecto de "arquitectura social", en Tecali, Puebla, que también podría llamarse de "activismo social", pero "ya desde la palabrita me choca. Si digo soy activista social es como desligarme de lo que soy. Debo participar desde adentro, no desde afuera. Y mi arte es el producto de estar dentro, de vivir los resultados de lo que somos".
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