Recomendada para inquietos y quienes no ponen atención

Obligan a consumir droga a 3.5 millones de niños para "mejorar" el aprendizaje

ROBERTO GARDUÑO

La hiperactividad y el déficit de aprendizaje en los niños mexicanos que acuden a escuelas privadas son argumentos suficientes para obligar a 3 millones y medio de infantes a ingerir una droga llamada Ritalín, cuyos efectos adictivos son similares a los producidos por la cocaína y la morfina.

El diputado priísta Benjamín Ayala Velásquez y las especialistas Tulia Conan y Margarita González, de la Comisión de Derechos Humanos Internacional, denunciaron que en las instituciones de enseñanza privada los sicólogos determinan la medicación a los niños, porque "se les ve inquietos y no prestan atención a los maestros y a los padres de familia".

Esta práctica se incrementa día con día, al grado de que en el país cada año se aplican 317 millones de dosis a niños con algún signo de hiperactividad.

La historia de este fenómeno se remonta a 1995. El Consejo Internacional de Control de Narcóticos de la Organización de las Naciones Unidas recomendó a los gobiernos mantener una vigilancia máxima para prevenir el "sobrediagnóstico del déficit de atención e hiperactividad" en los niños, así como el "sobretratamiento médico injustificado".

A pesar de ello, en México la venta de estimulantes se incrementó 800 por ciento entre 1993 y 2001.

En 1997 la Asociación Psiquiátrica Americana declaró que la hiperactividad era un trastorno conductual para incluirse en el manual de diagnóstico y estadística de desórdenes mentales. Algunos de los síntomas son que los niños cometen errores en el trabajo escolar u otras tareas; son desordenados y no terminan suficientemente sus tareas, mandados u otros deberes; frecuentemente no paran de mover los pies ni las manos y se culebrean en su asiento, o no dejan de hablar y tienen dificultad para esperar su turno en juegos.

Tulia Conan señaló que de esa forma los maestros y las maestras son convencidos con facilidad por "profesionales" de la salud mental de que los fracasos escolares en un niño son causa de un desorden, y por lo tanto necesitan medicación, precisamente el Ritalín, "droga que la Asociación de Administración y Control de Drogas de Estados Unidos categoriza como profundamente adictiva, como la cocaína y la morfina".

En Estados Unidos el consumo de drogas es tan extenso que actualmente 8 millones de niños toman medicamentos siquiátricos. A 6 millones de ellos se les prescriben estimulantes para solucionar desórdenes de aprendizaje.

"Siquiatras y sicólogos han utilizado al personal de los colegios para amenazar a los padres con la suspensión del niño de las escuelas si ellos se niegan a suministrarles medicamentos", indicó Conan.

El Grupo de Derechos de Incapacitados Mentales Internacional señaló que el informe de que 3 millones y medio de niños mexicanos toman fármacos siquiátricas debe ser una advertencia pública sobre la dependencia de las drogas para solucionar problemas de comportamiento.

Margarita González rechazó la naturaleza siquiátrica de la hiperactividad, porque "las drogas que se aplican a los niños en México y en el mundo pueden causar episodios sicóticos, comportamientos violentos y gestos extraños. El suicidio es la mayor complicación que ocurre cuando la persona deja de tomar la droga súbitamente", advirtió.